Una noche. Una noche bastó para que me enamorase de él. Una sóla noche fue suficiente para hacer que ese pequeño mocoso se quedara en lo más hondo de mi corazón. Una noche en la que me hizo sentir lo que nadie me ha hecho sentir en mi vida para luego desaparecer y no volver jamás.
Para explicar esto tengo que volver a aquella noche.31 de diciembre. Estaba preparándome para salir con mis amigos, Taehyung y Hoseok, una preciosa pareja que no tardaría mucho en dar el siguiente paso y casarse. Recuerdo bien la ropa que escogí: unos pantalones ligeramente ajustados color negro, una camiseta blanca y una chaqueta del mismo color que los pantalones. Recuerdo que hacía bastante frío y el tiempo amenazaba con nieve.
Me llamaron para que fuésemos a una fiesta que organizaba la hermana de Hoseok, querían convencerme de que podía encontrar pareja allí aunque yo lo veía muy difícil. A pesar de ello me presenté a las 10:30 en su casa después de cenar con mi familia.
Como me imaginaba, Taehyung y Hoseok estaban a lo suyo mientras yo me sentaba en un sofá algo apartado de la multitud con un vaso de whisky en mi mano, en el que estuve sentado durante media hora. Después de acabarme mi whisky decidí ir a por otra bebida a la cocina. Cuando volvía de allí crucé la mirada con un chico con un aire algo infantil, el cual vestía un precioso esmoquin negro como si hubiese venido de una fiesta importante. Ojos grandes y profundos, pelo marrón chocolate con unos leves rizos que le daban un aire sexy y unos labios muy deseables. Le sonreí sin poder evitarlo al darme cuenta que él me miraba atento y se acercaba a mí. Cuando llegó me quedé mirándole a los ojos a la vez que me presentaba.-Buenas noches. -Sonrió mostrándome la sonrisa más bonita que he visto jamás.-
Tras las presentaciones y una pequeña conversación típica de cuando no sabes qué tema escoger, decidimos acercarnos al sofá en el que me senté al llegar. Él se sentó allí mientras yo me colocaba frente a él en el suelo. Hablamos durante una hora sobre nuestros gustos y sobre conversaciones convencionales pero para nosotros fue como si hubiese pasado un minuto. Aquel chico tenía todo lo que yo podía desear. Era realmente perfecto.
-¿Sabes algo, Jimin? -Me miró sonriendo.- Odio estas cosas, empezar a hablar con alguien en fiestas, más en las de fin de año. -Seguía sonriendo.-
-¿Por qué? -Le pregunté bastante curioso y devolviéndole la sonrisa.-
-Siempre que comienzas a hablar con alguien se acaban pronto los temas de conversación hasta que consigues saber algo de la otra persona que te haga crear alguno nuevo. -Hablaba como si supiera más que nadie de la vida.- Y lo peor es cuando esa persona te gusta. Cuando conoces a alguien y acaba gustándote, acabáis haciéndolo la misma noche y es muy incómodo cuando vuelves a ver a esa persona, y aquí es cuando entra fin de año. En las fiestas de fin de año sueles desmadrarte, empezar a hacer locuras con la excusa de que es la ultima noche del año y que hay que disfrutarla, y al día siguiente se nota mucho más la incomodidad, esa que tienes cuando despiertas al lado de alguien a quien apenas conoces y sólo has tenido sexo ocasional. -Yo no dejaba de mirarle atento y sorprendido por sus palabras.- Así que te propongo algo. ¿Por qué no nos saltamos el paso de vernos mañana? ¿Por qué no disfrutamos esta noche sin pensar en lo que pueda pasar y no volvemos a vernos? -Me sonrió de una manera tan sincera que no pude negarme. Este chico tenía algo que me hacía quedar emombado.-
Como era de esperar, acepté. Aquella noche fue la mejor noche que he vivido, y cuando llegó la medianoche, fue el mejor comienzo de año que he tenido jamás y no he podido volver a repetir. , y no me arrepiento de un sólo segundo que pasé con aquel chico. Aquella noche nos besamos, hicimos el amor de una manera tan dulce que solo puedo recordar mis sentimientos más que el placer y cuando terminamos, me sonrió como no lo había hecho en toda la noche. En ese momento asumí que me había enamorado en una sóla noche a pesar de que no creía en las mentiras de los amores a primera vista. Le abracé y simplemente dormimos en esa posición toda la noche. Cuando desperté la mañana siguiente en la habitación de invitados de la casa de Hoseok, él se había ido. Lo único que me dejó fue una rosa roja junto con una nota que decía: ''Gracias Jimin, nunca te olvidaré. Siempre recordaré esta noche como la más maravillosa de mi vida. Espero que vivas bien y que me recuerdes de la misma manera.''
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Just Tonight - Jikook - ONE SHOT.
FanfictionUna noche. Una noche bastó para que me enamorase de él. Una sóla noche fue suficiente para hacer que ese pequeño mocoso se quedara en lo más hondo de mi corazón. Una noche en la que me hizo sentir lo que nadie me ha hecho sentir en mi vida para lueg...