Capitulo 1

10 0 0
                                    

Corría el mes de septiembre, cuando nuestras miradas se cruzaron. Cuando te apareciste de la nada, sonriendo. Nunca había visto cosa semejante. Desde ese momento, vi las cosas distintas. Ni yo misma pensaba que podía ser real. No sabia ni tu nombre, ni tu edad.. Nada.
Iban pasando los días y seguí ahí, mirándote.. Sin decir nada..
Tome coraje. Te mire, me miraste y sonreíste. En ese mismo momento decidí saber quien era el chico misterioso que me robaba los suspiros. Le pregunte a un amigo tuyo tu nombre. Me dijo: el chico ese de campera negra? Si, se llama Diego, pero le decimos Dieguii. Necesitas su numero?
A lo que conteste: Lindo nombre, y si sabes cual es, decímelo. Algo se el me llama la atención..
-tendría que preguntarle a el que opina- me dice dudando.
Me note temerosa, pero no iba a dar marcha atrás.
Asiento, y le dedico una sonrisa.

Llega mi horario de retirarme del trabajo, cansada decido emprender el viaje.
Pienso, no hago otra cosa que pensar en esos ojos marrones oscuros.. En esa sonrisa.
Salgo de mi burbuja y llegó a casa. Decido darme una ducha después del largo día en el trabajo.
Ceno, y como de costumbre reviso las redes sociales.

Es lindo entrar a Facebook y encontrar diferentes cosas, gente que se ama, que se odian, mal de amores, peleas entre otros.. Es divertido, cuando las cosas malas no te tocan.

Pasada la medianoche decido dormir.

Logro abrir los ojos para parar el maldito despertador a las 8 de la mañana.. que me tortura con su pitido.
Me río de mi misma al rezongar tanto.
Son casi las 9 de la mañana cuando decido de una vez por todas levantarme, y básicamente empezar a correr contrarreloj.

Desayuno, un clásico café con leche mas leche que café. Los expertos dirán que se llama "Lágrima" pero yo le digo así. Si, soy un poco testaruda.

Me cambio, me maquilló un poco, no mucho. Solo resaltar mis ojos achinados.

Tomar el colectivo para el trabajo es de lo mas insoportable, cabe recordar que trabajo a dos horas de mi casa. Quisiera vivir mas cerca, o en consecuencia tener un auto. No se cual es la idea mas loca que se me ocurre mientras viajo.

Mi móvil suena. No se quien podrá ser. Hago caso omiso y sigo con mi reproductor.
No existe nada mejor que la música para ponerme de buen humor, bueno, salvo su mirada.

Mientras suena de fondo alguna canción triste, vuelve a vibrar.
Abro la pestaña de mensajes y es mi queridísima amiga, Floppi.
"Hey, tu! Contesta de una vez"
Releo el mensaje anterior.
"Venís a horario hoy? Es que te echo de menos"
Amo esta amistad de simples compañeras de trabajo a amigas. Recuerdo que cuando ella empezó a trabajar, yo la detestaba. Después se me paso y terminamos siendo amigas de las mejores.
Envió mi respuesta:
"Hey, ya estoy a mitad de camino, deja de extrañarme. Tengo que contarte algo. Conocí a alguien"

Tres palabras mágicas para que en cuestión de segundos reciba respuesta. "Habla ya, o no querrás saber lo que pasara"
Tecleo mi respuesta.
"Tiene una sonrisa increíble, unos ojos oscuros que penetran a cualquiera. Ya averigüe su nombre, Diego. Un amigo quizá me consiga su numero de teléfono, pero no me hago demasiadas esperanzas"

En realidad, quería saber de el, de su vida, quizá tenga novia y nunca se entere que lo miro. O quizá no, grita mi subconsciente.

Sacándome de mis pensamientos llega un msj.
"Tenemos que hablar, apúrate. Te quiero"
Es una amiga de maravillas.
"En 15 minutos estoy ahí" envió.
Quizá sea un gran día.

Eso era lo que creía. Mis jefes me piden que por favor trabaje 10 horas hoy.. Solo por que mi relevo no llegara.
Asiento, y sigo con mi tarea.
Flor, me mira detrás del mostrador, incitándome a que le cuente todo.
-Y? Me gruñe.
-y que? Pregunto.
-ya no te hagas la tonta. Me mira con rabia de mentira.
- Creo que nunca había sentido esa conexión entre dos personas. Igual no quiero apurarme. Ya sabes lo que pasa cuando alboroto todo.
Asiente y me dedica una risa.
- Claro que no, pero y si es la persona que has estado esperando?
Sonrió.

El día pasa demasiado lento para mi gusto. Son las 9 de la noche, todavía me falta una hora para irme a descansar.

Miro el reloj. Son las 21:15 .
Niego con la cabeza y sigo haciendo mi trabajo.
Hasta que escuchó que me llaman.
Hago una seña para que me espere 2,minutos y voy.
- creo que conseguí lo que querías. Me dice sacando su celular.
Lo miro intrigada y pregunto..
-pudiste conseguirlo?-
Afirma y declara
- Al principio pensó que lo estaba molestando. Pero después se sorprendió cuando le dije que era para vos.
Lo miro asombrada.
- Le dijiste que era para mi?- mi corazón se detiene. Nunca tendría que haberle dicho que era justamente para mi. Parezco una acosadora. Me río de mis palabras.
- Igual, acá esta.- me dice señalando el móvil.
Afirmo y le doy las gracias. -te debo una!- grito.

Caminos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora