De vuelta a casa

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Narra Lucy 

Sentía que me tocaban el brazo 

  —Luce... despierta  —me hablaban y yo fui abriendo mis ojos lentamente 

—¿que pasa?  —pregunte frotándome los ojos 

—ya llegamos  —dijo Natsu y me di cuenta de que estábamos afuera de la Universidad 

Nos paramos y salimos del autobús corriendo hasta llegar dentro de la Universidad, ya que aún no se calmaba la tormenta.

—llamare a mi padre  —dijo Erza mientras sacaba su móvil 

—Erza Scarlet  —entro el maestro Gildarts buscando a la peli escarlata con la mirada —un auto te espera afuera  —dijo y Erza se quedo confundida 

—¿vamos?  —camino hacia mi 

—no, no te preocupes, iré a mi casa... algún día tendré que hablarle de nuevo a mi padre  —conteste 

—de acuerdo, adiós...  —dijo despidiéndose de todos y salió del edificio    

Fin de la narración de Lucy 

Narra Erza 

Salí del edificio de la Universidad y vi una limusina estacionada, ahí me esperaba un señor con un traje elegante y un paraguas. Este se acerco corriendo a mi y puso el paraguas sobre mi cabeza para evitar que me mojara 

—buenas tardes señorita Erza  —me saludo y cogió mi maleta 

—¿mi padre lo envió?  —pregunte y el negó con la cabeza 

—no no fue el, me envió otra persona...  —contesto 

—¿quien?  —pregunte confundida 

—es hora de ir a casa señorita  —cambió de tema ignorando mi pregunta y caminamos hasta la limusina

El señor me abrió la puerta y yo entre, después hecho la maleta al maletero y subió de piloto. Recargue mi cabeza a la ventana mientras veía como caía el agua al suelo 

El chofer comenzó a conducir y cerré los ojos quedándome dormida 

[Minutos después]

—no sabes cuanto te extraño —escuche que me dijeron y abrí los ojos de golpe... 

Voltee a todos lados pero no había nadie a mi lado; mire la ventana y me di cuenta de que estábamos entrando al estacionamiento de la mansión. El chofer se bajo y me abrió la puerta 

  —hemos llegado señorita  —me dijo extendiendo su mano y con la otra sostenía el paraguas 

Tome su mano y baje de la limusina, el antes mencionado me cubrió del agua con el paraguas y caminamos hasta la puerta de la mansión

—gracias  —le agradecí y entre  

El sonido de la puerta al cerrarse hizo un eco en la mansión, todo estaba en silencio, era como si todos hubieran desaparecido.

—¿hola?  —camine hacia la sala pero no había nadie 

Subí hasta mi habitación y al entrar todo estaba como lo había dejado antes. Tire la maleta en el suelo y me acosté en la cama muy cansada 

"No sabes cuanto te extraño"  esas palabras regresaron a mi mente en cuanto cerré los ojos. ¿Quién rayos me dijo eso? ¿Alguien estuvo a mi lado en los minutos en los que me dormí? Esas preguntas invadían mi mente ya que sentía que no solo había sido un sueño, si no que en verdad sucedió y alguien me hablo mientras dormía... 

Un Hermoso AccidenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora