todo comienza con un chico que decide dar su ultimo deseo a la chica que le ayudo a salir adelante con la única condición de que ese deseo se cumplirá solo si prometen devolverlo a alguien que lo necesite, comenzando así una cadena de milagros a ra...
Se levanto algo cansado; tenia la mirada borrosa y los brazos entumecidos... como si no hubiera dormido bien en la noche, no recordaba mucho de su pasado, pero alzo la mirada un poco y vio que sobre la mesa que estaba junto a su cama unas flores.
-quien traería flores a este frío cuarto sin vida? Sera que se equivocaron de habitación? Algún podre enfermo debe estar esperando su obsequio... y no llegó?- dijo el chico algo molesto- quien se va a acordar de alguien como yo!- dijo con lagrimas en los ojos, ya que el apenas tenia una tía, quien aparentemente se preocupaba por el, pero en realidad solo demostraba interés por la ayuda monetaria que le proporcionaba el gobierno para ayudarlo con sus medicamentos.
-esa mujer no me mandaría algo para mi, apenas recuerda mi nombre, yo que merecía estar aquí? Debí haberme muerto y así le quitaba un peso de encima a la sociedad que se ve obligada a mantenerme con vida!- pensó por un segundo antes de romper en llanto- déjenme morir! Ya para que seguir viviendo!- gritó... un grito que se escucho por todo el hospital.
al oír el gran estruendo del muchacho que rompía en llanto entro una chica, algo asustada al cuarto donde este se encontraba el. una chica hermosa, de cabellos negros sujetados por un enorme moño rojo, tenia ojos color café claro que reflejaban alegría y una voz muy dulce, entro con una enorme sonrisa cálida y llena de amor -oye, estas bien?...- pregunto la niña -oh, te gustan las flores?... vine de visita a ver a mi madre y vi que estabas totalmente solo... así que decidí dártelas a ti, ya que todos merecen algo de amor y amabilidad de vez en cuando.-
-así que fue ella la que trajo las flores- pensó el chico mientras se secaba las lagrimas y volteando la cara sin verla -gracias, pero no debiste molestarte, debiste dárselas a alguien mas... yo ya no valgo la pena-
al oír eso la sonrisa de la chica desapareció lentamente poniéndose de rodillas junto a la cama de hospital donde se encontraba el chico y tomándole la mano le dijo -pero que dices?, todos valen la pena y tu... te deje esas flores a ti entre todos los enfermos del hospital por que te vi solitario, y casi sin vida, y pensé que merecías algo de alegría, supuse que te gustarían-
el chico volteo la mirada para verla a la cara aun tomados de las manos -gracias pero... no quiero sonar desagradecido, pero no debiste, ni siquiera sabes mi nombre, ni yo el tuyo.... y me obsequias flores? que no me ves?... soy un moribundo que no tiene mas de un mes de vida pronosticada... estoy en este hospital solo esperando mi propia muerte, si eres lista... no volverás mas por aquí, no gastes tu dinero y mucho menos tu tiempo... eso no lo puedes recuperar!-
la niña sonrió al oír las palabras del chico sonrió y se puso de pie y se sentó en el borde de la cama y dijo: -me llamo Delmy, yo creo que aun vales la pena, solo te falta un poco de amor y un angulo diferente de ver las cosas, inténtalo al menos.-
el chico al ver la petición de la niña que estaba en el mismo cuarto de hospital que el le dijo: -esta bien, lo haré... pero sin ganas. me llamo Samuel, un placer conocerte Delmy...- y así hablaron mucho tiempo hasta que la niña tubo que irse.
"toma esto... dentro de esta bolsa esta mi ultimo deseo, puede conceder cualquier deseo. debes tomar esto e ir con ella entonces le concederás su deseo...con la única condición de que ella también debe darlo a alguien mas para poder ayudarlo... por favor no olvides tu misión, te lo agradeceré mucho... entendido?"...
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