Día 1.

21 0 0
                                    

31/06/16.

Vale, estoy empezando esto por segunda vez, porque se me ha borrado lo anterior.

Como decía antes, es un poco penoso escribir esto, también lo es por el hecho de que el autocorrector me corrige cosas que no son y tengo que escribirlo todo de vuelta.

Ahora mismo estoy en mi cama sentada a lo indio, con la espalda recostada en la almohada que se apoya en la pared, y mi peluche de Mickey entre el espacio de mis piernas.

Las manos me tiemblan, siento frío. Y no sólo porque estamos en otoño, porque a veces, el frío es mucho más que una sensación.

Mi abuela se está por ir a trabajar. A ella la quiero, aunque a veces discutamos por tonterías. Su vida fue dura, supongo.

Mi madre no está, fue a hacer mandados, o eso me dijo. También la quiero, aunque me pegaba. La última vez, fue verdaderamente horrible. Da igual, no lo ha vuelto a hacer desde entonces, a pesar de eso, es buena madre, y también lleva una vida complicada.

Mi padre no sé qué está haciendo, debe de estar en su casa, o quizá en el trabajo. Se separó de mi mamá cuando yo tenía tres, pero encontró a alguien y se casaron, tuvieron un hijo.

Mi hermano, Joaquín, tiene siete es mi cable a tierra, pero ¿saben? El problema con los cables es que no soportan mucha distancia, y ahora, que es cuando lo necesito, esta lejos. Creo que el cable se ha cortado, lo puedo sentir. De no se así, no estaría haciendo tonterías.

18:21 pm

Me acaba de llamar mi novia. Es raro llamarla así, nunca lo había dicho, o escrito. Estaba escribiendo esto y me llamó, me preguntó qué me pasaba. Sabe que algo me pasa, claro, me conoce. Estuvimos hablando un rato de que tenía miedo que la dejase por mis inseguridades, hablamos de que la gente intenta separarnos. Líos anteriores llevan a esto.

Soy idiota.

Lo soy.

No debería de estar haciendo esto, lo sé, pero ya no tengo a nadie que me mantenga de pie, las distancia que hay entre las personas que me dan motivos para vivir, molesta, duele.

Me siento sola aún sabiendo que no lo estoy, qué irónico.

Creo que está haciendo efecto, la cabeza me duele y los ojos se me entre cierran, no sé si veo borroso por esto o porque no llevo los lentes puestos.

Hearts on fire de Cimorelli entra por mis oídos y la melodiosas voces de las 6 hermanas me ayuda a mantener la calma.

Sigo temblando.

Me duelen los ojos.

La canción terminó, ahora suena otra de su primer álbum.

Me siento fatal.

Estoy respirando más profundo.

¿En qué me metí?

Debería acabar con el dolor, no sé qué hacer.

Hoy ningún alimento sólido entró en mí, solo tomé un cuarto de la leche de la mañana y me he tomado creo que cuatro pastillas. Pero no todas juntas, primero dos, y luego de unas horas otras dos.

Odio esto, quiero irme lejos por un tiempo, no ver a nadie de las personas que me rodean a diario en el liceo. Me cansé de ellos. De que me digan qué hacer y qué no.

Oh, por cierto, hoy no fui, me levanté pálida y mi madre me dio la posibilidad de quedarme. Obviamente lo hice.

Es injusto para mi familia lo sé, pero nadie de ellos sienten esta opresión.

Creo que sólo estoy buscando una excusa, pero no me importa.

Quizá (lo más seguro) es que me arrepienta. Sé que a fin de cuentas lo voy a hacer.

Bien creo que es todo por ahora. No sé qué voy a hacer con esto.

19:12pm

Me acabo de tomar otra pastilla.

Todos piensan que estoy bien.

No quiero ir mañana al liceo, mi novia me va a ver, va a saber que algo está mal y no es que esté enferma.

Pero finji un par de veces, espero poder con esto.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 01, 2016 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Maybe it's a goodbye.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora