Día 1:

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No sé por cuantos días tenga que escribir para olvidarte.
No sé que decir o hacer.
Si pudiera de alguna manera...¡lo haría! y tal vez esa es la razón por la cual escribo un libro para ti, porque no hay otra forma de librarme de tu recuerdo, que escribiendo el porque no lo deseo.
Te he querido como a nadie, juré que tu eras el amor vida; el chico con el que quería pasar el resto de mis días; sin embargo hoy me doy cuenta que soy demasiado joven e inmadura para decir palabras tan fuertes.
Estoy convencida de que ya no siento lo mismo, porque una vez que te preguntas si de verdad lo quieres o dices "lo olvidaré", ya estas a un paso de hacerlo.

Recuerdo perfectamente el día que te conocí, ¿tú lo recordarás?; aunque es un sentimiento viejo, imaginarme de nuevo ahí, me hace sentir esos nervios y la corriente eléctrica que provocabas en mí; más sin embargo no puedo olvidar esos hechizeros ojos cafés que atraparon mi alma.
Tenías 17 años; un corte de cabello demasiado extraño y una sonrisa que hacia creer que querías comerte al mundo, aún cuando ahora estes físicamente más guapo, prefiero al chico que conocí.
Nuestras miradas se cruzaron esa tarde, tu amigo, en ese entonces "mi mejor amigo", nos presento y al hacerlo, mi corazón dio un giro que no puedo explicar, sólo sé que no quise reconocerlo hasta hoy, porque entonces tenía un chico increíble a mi lado y no pensaba dejarlo por alguien como tú.
No recuerdo más de ese día, son detalles borrosos los que nublan mi mente.
Conforme los días pasaron empezamos a hablar siempre de cosas tontas, graciosas y poco geniales; hoy me doy cuenta de que no he podido durante todos estos años (ya sea que lo consideres muchos o pocos) dejar de hablar un sólo día contigo. Puede ser esa la razón de porque te escribo por aquí, ya que es una manera de hablarte sólo que sin esperar respuesta.

Te contaré algo, porque no recuerdo si lo hice... cuando era pequeña subía todas las noches a la azotea para mirar la luna, la miraba tanto que llegué a pensar que ella podría hablarme, realmente es lo que esperaba, que ella pudiera hacerlo y así con un lindo cántico pudiera arruyarme.
Siempre lloraba cuando hablaba con ella, tal vez porque apenas empezaba a saber de la vida o quizás era bastante la nostalgia que sentía al ver lo hermosa que es, no es que ahora sea una experta en la vida, pero antes mis problemas eran tonterías; mientras lloraba le pedía encontrar al amor de mi vida, sí de nuevo subiera a hablar con ella, primero lo haría en una madrugada sola y por consiguiente ya no pediría amor, sino que esperaría poder mirar el mundo, dejar un embrujo en cada rincón donde pudiera estar, porque ahora aunque suene muy egoísta sólo me importa lo que sienta mi corazón, ya no me importa salvarte, no pude, no puedo, no podré y más que nada porque no me dejas curarte, sólo me enseñas un poco tus heridas y después evades mis cuidados  esperando a que llegue otra chica a sanarte; "una increíble chica" con la que puedas pasar el resto de tu vida. ¿Y sabes qué? De verdad deseo que la encuentres y te quiera mínimo un poco de lo mucho que te he querido; porque siendo un poco, sería más de lo que todas las chicas con las que has estado te han querido.

Déjame contarte que he aprendido en esta corta vida...
Es tan cansado darle gusto a las demás personas, sin dartelo a ti, esperar a que ellas quieran sentir lo que sientes, pero a nadie se le puede obligar nada, nacimos solos, morimos solos, en nuestro cuerpo habita un alma, somos uno mismo así que concluyó que somos libres de pensar o hacer lo que deseémos (sabiendo que todo tiene su causa y efecto), no podemos esperar que por caprichos nuestros, los demás hagan lo que les pedimos.

Sí pudiera desear algo, sería tener amnesia temporal, para borrarte de mí y hacer como que no existió esos días juntos, esas horas,minutos, esos besos y caricias. Desear no haberte conocido aunque fuiste el infinito más grande que tengo en la memoria, pero por otro lado ¿Cómo hubiera conocido el amor?, ¿Cómo sabría lo increíble que es sentir cosas por alguien?, ¿Cómo sabría que se siente querer a alguien tal cual es, con todos sus defectos?, es ahí cuando agradezco todas las enseñanzas; te deseo luz, amor, prosperidad y de lo mejor, pues mi vida no sería como es sin haberte conocido.

Hoy mi hermana me preguntó por tí; ¿adivina que conteste?:
-Lo quise más de lo que he podido querer a nadie, pero ya no lo buscaré-.
Y creme, este no fue el inicio del ciclo de olvidarte, empezó mucho antes... tal vez la primera vez que te escuche decir: "lo siento pequeña, pero no".
Sin embargo sí es el inicio de esta historia, nuestra historia.
Pd: En las posdatas siempre diré algo que me gustaba de ti.
Pd2: Tus ojos.

La Historia De TiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora