Te esperé con la sangre detenida
sobre el silencio en ascuas de tu ausencia.
Te esperé soportando la existencia
como un lebrel al pie de tu partida.Te esperé casi al borde de la herida
y a dos pasos no más de la demencia.
Te esperé en la angustiosa transparencia
de aquella noche en el reloj vencida.Pero qué inútil la mortal espera:
Sin pensarlo cité la primavera
cuando el invierno helaba mis rosales.Y hoy que casi olvidaba tu presencia,
me estoy enamorando de tu ausencia
a través de mis propios madrigales.Autor del poema: Jorge Robledo Ortiz

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DESAMOR
PoetryEstos son los poemas que yo he leído de desamor ( obviamente ) que más me han gustado. Aclaro que yo no los he escrito. Espero os gusten tanto como a mi. Portada echa por mi.