1

258 17 4
                                    

Hola me llamo _____ y tengo 15 años, soy la princesa del reino de Aquaris. Muchos piensan que es genial ser princesa y no digo que sea horrible, pero es difícil. Tienes que ser elegante y calmada eso es lo contrario a mi. En el castillo tenemos muchos sirvientes, entre ellas está Luka. Ella es la sirvienta personal de mi madre pero como ella nunca tiene tiempo para mí, Luka es como una segunda madre; ella me cuidaba y jugaba conmigo de pequeña. 

Estaba en mi escritorio escribiendo una carta para mi mejor amiga Miku

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Estaba en mi escritorio escribiendo una carta para mi mejor amiga Miku. Ella es princesa al igual que yo pero del reino verde.

-Hola ______.- dijo Luka mientras se acercaba a mí.

-¡Hola Luka!- dije muy animada 

-Tus padres quieren hablar contigo.

-Que milagro.-dije mientras me levantaba de la silla 

-_______ sabes que no debes hablar así de ellos, sé que no tienen mucho tiempo a veces pero a pesar de todo te aman.-dijo mientras se acercaba a mi y me abrazaba.

-Lo se, pero a veces siento como si fueran extraños.-dije al separarme del abrazo.

-¿Qué estabas escribiendo?-preguntó Luka

-Una carta para la princesa Miku.-dije regalandole una sonrisa.

-Bueno es mejor que vayas a ver a tus padres, no quieres hacerlos esperar sabes que odian eso.-dijo mientras me me guiaba a la puerta.

Al llegar al cuarto del trono estaban ahí sentados mis padres con su cara de enojados como siempre.

-Tardaste mucho en llegar.-dijo mi padre enojado

-Si lo sé, lo siento.-dije mientras rodaba mis ojos disimuladamente.

-Llegar tarde no es de princesas _____, tienes 15 años, en un tiempo tomarás mi lugar y es inaceptable que una reina llegue ni un minuto antes o después.-dijo mi madre mirandome fijamente a los ojos. Como odio que me recuerde que seré reina...-¿Por qué no puedes ser como tu hermana Teto? Ella se comportá más como una dama. Si tan solo ella hubiera nacido primero...

-¿Por qué siempre tienes que compararme con ella? Somos diferentes, ella es ella y yo soy yo.-dije levantando un poco la voz, odio que me comparen con mi hermana.

-¡¡No me levantes la voz niña malcriada!!-grito mi madre.

-Hija no te llamamos aquí para pelear, si no para decirte que te conseguí un sirviente personal.

-No necesito un sirviente personal, tengo a Luka.-dije yo.

-Si pero ella está aquí para servirme principalmente a mí y no quiero que la distraigas con tus estupideces.- dijo mi madre un poco enojada.

- Mañana comenzará a trabajar para ti. Eso es todo puedes retirarte.-dio mi padre

-Pero y-empecé a decir pero fui interrumpida por mi padre.

-Es todo he dicho. Retirate porfavor antes de que le causes a tu madre un dolor de cabeza.

-Si padre.-dije triste mientras hacía una reverencia y me iba fuera de ahí.

Cuando me abrieron las puertas, afuera estaba mi hermana Teto, al parecer iba a entrar a la habitación.

Cuando me abrieron las puertas, afuera estaba mi hermana Teto, al parecer iba a entrar a la habitación

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


-Buenos días hermana-.dijo mientras me sonreía.

-Bueno días Teto.-dije al regresarle la sonrisa.

-Si me disculpas tengo que hablar con nuestros padres.-dijo mientras avanzaba a la habitación.

-¡Hija! Que bueno verte, ¿que se te ofrece?-dijo mi madre feliz.

Después de escuchar me fui a mi habitación rapidamente, sentía que las lagrimas amenazaban con salir en cualquier momento. Mi madre cambiaba completamente de actitud al ver a mi hermana, y no la culpa, ella realmente actúa como la princesa perfecta. Ahora ya no iba a tener a Luka para consolarme cuando estuviera triste ahora tendría a un desconocido en el cual no se si pueda confiar. Conociendo a mis padres de seguro es una señora muy estricta y aburrida que les contara todo lo que hago en el día. Al llegar a mi habitación me deje caer sobre mi cama y dejé las lágrimas salir. Estaba sola como siempre...

-Buenos días princesa.-me despertó una de las sirvientas.

-Buenos días.-dijo un poco dormida.

-Su padre la llama.-dijo mientras se retiraba de la habitación.

-Es hora de conocer a mi sirviente creo.-dije para mi misma.

Me vestí, salí de mi habitación y me dirigí a el cuarto del trono.

-Buenos días padre.-dije mientras hacía una reverencia.

-Buenos días, te presentaré a tu nuevo sirviente. ¡Diganle que entre!-le dijo a los guardias y ellos abrieron las puertas.

Cuando las abrieron vi a un chico rubio de ojos azules. La verdad es guapo..Esperen un segundo en que estoy pensando, es mi sirviente, además si lo escogieron mis padres no se puede confiar en él. Aunque no puedo negar que tiene uno ojos muy lindos.

-Él es tu nuevo sirviente.-dijo mi padre mirándome.

-Len Kagamine a su servicio majestad.-dijo al besar mi mano, podía sentir mi cara arder. ¿Por qué me sonrojo? Ya estoy acostumbrada a esto.

-U-un gusto Len.-dije tartamudeando. ¡¿Ahora tartamudeo?! ¡¿Qué me está pasando?! 







Mi princesa (len y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora