Capítulo 1.

59 1 1
                                    

Las luces de la discoteca parpadean en mis ojos. Puedo ver como la boca de Fernanda se mueve, e intento leer sus labios para descifrar lo que me está diciendo, pero me es imposible.

La música está demasiado alta y muevo mi cuerpo al compás de ella.


-Ven.. vamos! --grita Fernanda en mi oído.


La sigo mientras ella camina delante y guía mis pasos. Éste lugar está demasiado lleno y ni siquiera se puede caminar. Detesto cuando las discotecas se encuentran de esta forma, siendo sincera no me gusta mucho salir a bailar. Lo hago muuuy de vez en cuando, este tipo de música no va conmigo.


Subiendo unas escaleras llegamos a un parte superior del suelo, está un poco más alto y el aire pasa mejor... Nos quedamos contra la baranda de la pista, y así podemos ver como todo el mundo baila en la pista principal.


Una canción empieza a sonar y comienzo a bailar. Una mano en mi cabeza recogiendo mi pelo, y la otra en mi cintura, mientras muevo mis caderas de un lado a otro.


Siento como muchas miradas se dirigen a mí, toda la pista puede verme al estar en un lugar más alto. Esto no me detiene. Cierro los ojos y me sigo moviendo, no me importa captar las miradas de todos los hombres. Un par se me acercan, pero los rechazo. No estoy de ánimos como para estar con un chico esta noche. Sólo quiero divertirme y bailar con mi amiga hasta que el cuerpo no me de más.

Las canciones siguen pasando, y otros chicos se acercan, pero los ignoro. Siento muchas miradas puestas en mí, pero hay una que capta mi atención.


Es un hombre, está en una barra en frente de mí. Toda la pista nos separa, pero él no deja de mirarme. Lo observo un poco mientras me sigo moviendo y noto que lleva una cerveza en su mano, está recostado en la barra y bebe su cerveza sin quitarme los ojos de encima. Una chica le habla y asiente con la cabeza, pero sigue mirándome. Hasta que me llega a intimidar.

Me sigo moviendo y lo ignoro como al resto, cierro los ojos y sigo bailando junto a Fer.


-Qué bien que bailas... --dice un chico detrás de mí.


Estoy con la esperanza de que sea el hombre que me miraba, pero su voz no sonaba como me la imaginaba.

Me giro y me encuentro con un chico rubio de ojos verdes. Es bastante guapo y le sonrío.


-Gracias.

-¿Quieres bailar conmigo?

-Estoy con mi novio. --miento para que se aleje.

-Mmm.. no lo creo.


Vuelvo a mirar para el frente y el hombre que me miraba sigue allí, de la misma forma que hace diez minutos. La diferencia es que en vez de una cerveza, está bebiendo un vaso con algo que no logro saber que es.


-Anda... vamos a bailar... --vuelve a decir el chico a mis espaldas.

-Lo siento, quiero bailar sola.

-Ok, linda. Si quieres bailar me buscas, estaré afuera.


Le sonrío y se marcha. Fernanda sonríe y se acerca, nos abrazamos y seguimos bailando. Somos muy buena dupla en las pistas de baile, ambas sabemos movernos bien y captamos las miradas de todos los hombres y hasta de la de las chicas.

Mi soledad.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora