El pueblo del Valle de broto , era famoso ya que albergaba a una de las comunidades mágicas más grandes del mundo, en ella se pondrían encontrar diversas criaturas, desde los duendes y elfos, hasta los animales más místicos como los unicornios o centauros, además de una variedad de aves como los hipogrifos, los cuales volaban sobre el pueblo todas las tardes.
Además de todas esas criaturas existían los magos los cuales dominaban y controlaban los negocios del pueblo, desde tiendas de varitas mágicas y túnicas, hasta locales especialmente dedicados a la alquimia y las artes oscuras.
Aquel Valle había dado varios personajes conocidos a lo largo de la historia, hechiceros famosos los cuales habían dejado una huella inimaginable en el mundo de la magia.
Desde el alquimista Nicolás Flamel hasta uno de los más grandes hechiceros de la historia Merlin.
Era verano y aquel día había pasado un acontecimiento qué pasaría a la historia como el día en el que el heredero del mago más poderoso que había pisado esta tierra nacía.
Su nombre desprendía una mezcla de pánico, miedo, y fuerza con solo pronunciarlo:
Darkon heredero de Hades.
El Niño sin embargo no se imaginaba que su futuro estaría lleno de poder y fuerza.
