Soy El Chico Nuevo

Capitulo 1: Primer dia

Yo era un Chico normal. Tenia muchos amigos en mi antigua ciudad. Hasta que me mude. Trasladaron a mi madre a un Pueblo de Castellón.
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Me desperté un lunes asqueroso. Odio los lunes. Salí de la cama y me vestí delante del espejo mientras recitaba algunas cosas que podrian ayudarme a no pasar un primer dia tan malo. Me llamo Leo, tengo 14 años. Vengo de la Puebla de Sanabria, y me gusta el atletismo.
Mientras iba pensando, mi madre me llamó para decirme que el desayuno estaba listo. Pan tostado acompañado de un vaso con leche y colacao. Baje las escaleras que separaban las habitaciones de la planta baja y me sente en mi silla de madera para comer. Mi madre empezó a decirme el horario y donde tenia que cojer el bus, que me llevaba a la escuela, la mire a los ojos donde ya empezaban a asomarse las arrugas y le dije: todo irá bien mama, solo voy al colegio, no te preocupes tanto. Ella se limitó a asentir con la cabeza.
Me termine la comida, cogí la bolsa con todo lo del dia preparado, me despedí de mamá y me fui corriendo hacia la parada del bus, que ya llegaba tarde. Al parecer, fuí el último de entrar en él asi que solo quedaba un sitio, justo al lado de una chica. Bien -pensé-. Ojala sea de mi edad y asi puedo empezar a hacer amigos, o algo mas.

-Hola, ¿puedo sentarme?

-Claro que si. Respondió si apartar la mirada de la pantalla de su telefono.

-¿De que curso eres?- le pregunté mientras me sentaba a su lado y me quitaba la maleta.

-¿De tercero y tu?

Perfecto, era de mi curso asi que ya podia empezar a relacionarme y hacer amigos.

-También.

-¿Por cierto como te llamas? Yo me llamo Leo.

-Ainhoa -me indico con una medio sonrisa en la cara y al fin levantando la mirada. Tenía unos ojos cafes cualquiera.

Estuvimos hablando durante los 20 minutos que duraba el viaje hasta el instituto. Durante este trayecto, me di cuenta de dos cosas: que era muy maja y que parecia no tener muchos amigos.

Al llegar al instituto, me fijé en que las chicas que mas o menos creia de mi edad, no estaban del todo mal, bueno habia solo unas cinco chicas aceptables.

El sitio era muy grande, teniamos tres plantas enteras solo para secundaria y batxillerato. Ainhoa se ofreció para guiarme un poco hacia donde teníamos que ir. Primero, fuimos a uno de los cuatro enormes patios que teníamos. Allí nos dijeron nuestras respectivas clases. Los nombres que mas me llamaron la atención fueron: Rosa Folter y Julia Pijote (las dos tenian unos buenos pechos y culos)
A la classe A, la mayoria eran mas feas que en la mia pero eran mas accesibles ya que las de mi grupo eran las típicas que iban con los populares. Lo bueno de que acabaran de mezclar los grupos era que ahora todos intentaban encajar, igual que yo.
El resto del dia fue bastante tranquilo, ya que en la mayoria de clases lo único que hicimos fue que los profesores nos dieran en que grupo íbamos (cada curso lo dividían en tres grupos: el primero estaba formado por dos tercios del grupo A, el segundo por dos tercios del B y el último por los restantes) y los ítems avaluativos de la materia.

A la hora del patio, fui a conocer a algun chico. Claro estaba que no iba a ir con los populares.
Habia uno que se llamaba Carlo que era de piel oscura, y tenia bastante caracter. Otro se llamaba Neseca y estaba saliendo con una de segundo. Los dos eran muy majos, se nos unieron dos chicos mas llamados Gus, el mas bajito, y el otro era bastante alto y se llamaba Pol. Les gustaba mucho el baloncesto y estuvimos jugando durante todo el rato.

Las ultimas dos clases fueron igual que las otras, pero en matemáticas me senté a la hilera del medio junto con Ainhoa ya que en las otras clases teniamos que sentarnos como indicaban los profesores.

Salimos del instituo a las 2:30 y me estaba muriendo de hambre, así que en cuanto el autobús nos dejó salir a los últimos, me fuí corriendo a casa a comer y a ser bombardeado de preguntas por mi madre.