q u i n c e

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Después de que Lorena se presentase a Austin, me dijo:

-Nunca antes había estado en Steven Point, podríamos ir a comer por ahí y eso- me dice mostrándome una encantadora sonrisa.

Mierda.

-Claro... aunque es una ciudad bastante pequeña y no hay muchos restaurantes ni nada por el estilo... jaja- dije intentando escaquearme.

-No pasa nada, me vale un McDonnals-

Doble mierda.

-Entonces vale-

Cogí mi bolso y salimos de allí dejando a Lorena viendo una película ochentera.

***

Después de comer en un KFC, ya que el McDonnals estaba cerrado, fuimos a dar una vuelta por la ciudad. Desde las casas pijas, hasta el "barrio bajo".

-Es bonito- dice él de repente.- se respira paz, nada que ver con Dublín.

-Nunca he estado en Dublín.

- Un día iremos juntos, te presentaré a mis amigos para que no tengas problema para conocer gente nueva.

La verdad es que me horroriza la idea de irme a Irlanda con Austin y dejar aquí a Lorena, a Pablo y a Jake.

Nos paramos en un mirador del barrio alto, con unas vistas preciosas.

-Todo volverá a ser como era antes- dice, y veo que se inclina hacia mí.

¿Va a besarme? Sí, va a hacerlo.

Lo detengo.

-Eh... Austin, verás yo es que... tengo novio.

¿Qué? ¿Por qué mierda he dicho eso?

-Ah... vaya, lo siento. No lo sabía. ¿Quién es?- pregunta.

Triple mierda

-_____- Oigo que me llaman desde atrás.

Es Abraham, siempre aparece en el momento oportuno.

-Cariño- le llamo y le planto un beso en los labios- por fin llegas.

Abraham se queda mirándome mientras le dedico una sonrisa forzada.

-Cari, este es Austin. El chico que se fue a Irlanda, ¿recuerdas que te hablé de él?- le digo mientras clavo las uñas en su mano para que me siga el royo.

-Sí sí, claro que me acuerdo... cariño- dice mirando hacia mí.

-Austin, este es Abraham. Es mi novio-
-¿Tu qué?- dijeron los dos a la vez, pero clavo las uñas más fuerte para que se calle.

-Ay! Sí soy el novio... su novio... eso... hola, jaja.

-Joder, mira que tarde es. Abraham, llegamos tarde.

-eh... sí sí, tardísimo.

-Lo siento Austin, pero tenemos que irnos.

Cuando salimos de allí por patas, me pregunta:

-¿A qué a venido ese numerito?

-Necesito que te hagas pasar por mi novio.- le digo cortante.


Continuará...

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La chica de los ojos verdes (Abraham Mateo y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora