Estúpidos humanos

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El tacto se hizo más duro cada segundo, arañaste tu piel en busca de caricias que te apaciguaran un poco.
Los susurros se volvieron llanto
El llanto se convirtió en furia, la furia en golpes y los golpes en susurros otra vez.

Te ahogas, lloras y te desesperas como si estuvieras siendo asfixiada por un asesino.

Llevas contando hasta diez hace al menos una hora, ni así consigues calmar tu perturbada mente... Tu corazón realmente duele.

Es algo estúpido ya que el corazón es solo un músculo incapaz de sentir todo aquello que el ser humano se empeña en presumir con aspavientos.

No hay que ser ridículos por Dios, los idiotas somos nosotros que adjudicamos nuestros sentimientos a un órgano que sólo bombea sangre y nos mantiene vivos por un tiempo.
Culpa a tu cerebro, humano ingenuo que te empeñas en encontrarle sentido a tu dolor, deja de ser tan imbécil de una buena vez.

Tus ilusiones acerca de lo maravilloso que es el palpitar de tus deseos se vienen abajo, mejor agárrate de tus sueños, porque la caída va a matarte.

Aquello que faltaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora