¿ y si Múlan fuera hombre ? Múlan el Joven Guerrero.

SI MÚLAN FUERA HOMBRE

Esta historia fue una de las primeras que escribí, las faltas ortográficas y de redacción son infinitas, actualmente me encuentro corrigiendo las faltas ortográficas para una lectura más amena, sin embargo, me sería imposible mejorar la redacción en su totalidad sin acabar modificando la historia, los escritores me entenderán. Si te topas con partes aún sin editar pido que no las corrijas, ya me encuentro en ello. Sin más que decir, disfruten.

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Un mundo en donde Múlan nació como un chico, una de las historias más famosas de Disney con unos cuantos cambios para el deleite de un público muy bizarro.

-No se me ocurrió otro nombre para Múlan.

-Personajes nuevos para la trama.

¿Mi nombre? pues es Fa Múlan... tengo 17 años y vivo en china con mi madre Li y mi padre Zhou el cual en gran honor a nuestra familia lucho en la guerra para proteger a china...y con mi hermano mayor Shaoran quien vive en nuestra casa con su esposa Bo y su hija Maylin (de 13 años) y mi abuela Fa.

Hoy es el día que la casamentera viene para evaluar a las chicas de mi edad ¡Ja, ni que fueran carne! – pensaba Múlan mientras toda la familia caminaba al lugar donde las jóvenes se reunirían.

Múlan: Porque tenemos que venir a ver esto – Reclamo mientras arrastraba los pies.

Li: Es que a Maylin le emociona ver este evento ¿No es tierno? – Aplaudió jovialmente la orgullosa abuela, si había algo en este mundo que ella amase más que a sus dos hijos era su nieta, con la cual compartía gustos y pensamientos por igual.

Múlan: No, no lo es ella aún es muy pequeña y ¿Porque tenemos que venir todos?

Zhou: Múlan por favor, es un momento familiar, además es una buena oportunidad para que veas a una dama, ya sabes, alguien que pueda ser tu esposa.

Esas palabras ponían a pensar a Múlan ¿Él con una esposa? ... No, no no, él no se miraba casado o con hijos, además ¿Acaso no es aún muy joven? La idea le ponía los pelos de punta.

En ese momento comenzaron a llegar todas las jóvenes que se movían con la elegancia de un cisne y posaban con la delicadeza de una flor, para entonces Maylin se encontraba gritando eufórica.

Múlan: Esto será muy largo...

*

Múlan y su familia regresaron a su hogar tras cuatro largas horas, en las cuales observaron cómo chica por chica llegaba ante la casamentera, temblando como un ave recién nacida y salían triunfantes, con aires de soberbia a causa de su reciente logro, claro que ese no fue el caso de todas.

Mientras Múlan entraba a la casa llegaron al pueblo varios caballos y sargentos del Emperador, todos en el pueblo comenzaron a salir de sus modestos hogares, cuando el joven pelinegro se disponía a seguirles su madre le detuvo adentro con Maylin.

Chi fu: ¡Eh traído un mensaje muy importante desde el palacio, china está siendo atacada y por orden del Emperador un hombre de cada familia deberá ser enlistado en el ejército!

El más joven de la familia, que se encontraba trepado sobre unos cestos junto a su sobrina, se espantó, trato de buscar con la mirada a su padre, él ya era demasiado anciano para la guerra, le era imposible luchar, pero siempre había sido muy terco, Múlan temblaba ante la idea de que su padre volviese a tomar una espada.

Maylin: Múlan ¿Qué es lo que está diciendo ese señor? – comento asustada, apenas podía oír desde tan alto y los murmullos de las personas no ayudaban.

Múlan: ¡Ah! No es nada Maylin ¿Por qué no mejor entras a la casa?

La pequeña niña obedeció y corrió hacía el refugio de su hogar, mientras Múlan bajo, con dificultad, de sus escaleras improvisadas para correr hacía la puerta, en ese momento la chillona voz del hombre con los documentos enviados desde el palacio grito un nombre que lo hizo parar en seco.

Chi Fu: ¡Fa Zhou!

Imposible, fue lo que salió de los finos labios del joven desalineado al observar la cobardía de su hermano, a diferencia de muchos otros valientes jóvenes, su hermano Shaoran se había detenido con el toque de su esposa Bo, que con una mirada suplicante le detuvo de ir a recibir la orden del Emperador en lugar de su anciano padre, quien con mucho orgullo camino hasta los pies del mensajero para recibir su orden de reclutamiento, él sí sabía lo que era el deber.

Múlan: ¡No, un momento!

Madre: ¡Espera Múlan! – Murmuro con mucha severidad su madre, mientras lo sostenía de un brazo para evitar que los nervios del momento le ganaran.

Múlan: ¡Madre, papá no puede ser reclutado!

Madre: ¡Lo entiendo! Esto no debería ser así – Sollozo con una voz que alertaba las emociones que la inundaban, tratando de permanecer serena volteo la mirada hacía su hijo mayor- Esto no debería ser así.

Shaoran – Con los nervios de punta ante la helada mirada que solo una madre puede tener – Que fue lo que hice.

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Amonos