Pero... Sabes que es verdaderamente difícil?
Fingir que ya no siento nada por ti.
Esa última vez me dijiste que ya no querías seguir con esto y aunque por dentro me estuviera muriendo, yo solo te decía que si.
Solo podía pensar en todo lo que había pasado mientras trataba de memorizar todos los detalles de tu rostro como la primera vez que te besé, ya que sabía que probablemente esa sería la última vez que te tendría tan cerca.