Recuérdame.

Siete.

Los doctores quieren inyectarte algo para que 'dejes de sufrir'.

Nadie lo quiso.

No puedes irte.

Ellos ya no quieren cuidarte.

Dicen que no tienes oportunidad.

Pero no perderé la esperanza de que vuelvas, mi niño.

Eres un niño con edad de adulto, siempre lo pensé, ahora eres un niño que debe luchar. Ahora más que nunca.

Así como cuando luchaste para que te admitieran en seventeen, cuando eras un adolescente que según todos era inútil. Ganaste esa guerra, mírate. Eres todo un idol, por completo. Eres un soldado, un guerrero, saliste adelante ignorando a esos que te decían que no ibas a lograrlo.

¿Recuerdas? ¿Recuerdas cuando te seguían hasta la sala de ensayos para reírse de tí? ¿Recuerdas el orgullo que sentías cuando debutamos? Ese orgullo debes sentirlo por haber ganado esta guerra.

Puedes superarlo, incluso si algún día ya no podrás (Y esto lo digo con todo el dolor de mi corazón) El cáncer terminal no es broma, eso lo sabes, es algo grave y lamentablemente, la vida te dio ese peso con el que cargar. Nadie sabe si te queda mucho o poco tiempo, pero por favor despierta. Haz que el tiempo que te queda sea a nuestro lado y no recostado en aquella camilla sin saber lo que está ocurriendo.

Debes abrir los ojos.

Despierta.

No importa cuanto tiempo estés aquí, pero quiero pasarlo a tu lado.