Madison Y Las Leyes Del Futuro

Capitulo 1.

Capitulo 1. "Obsequio".

Mi abuelo,William McKinley, era un fan de las aventuras, tanto que decidió hacer su vida de ella, en un viaje, a la Isla del Caribe, encontró la gema de cristal mas bella jamás encontrada y en otro viaje a Aconcagua en la provincia de Mendoza, Argentina, escalo una de sus montanas, encontrando en la punta una cueva misteriosa..

Hoy en día, pasa sus día con medicamentos y tratamientos en el asilo, después del fallecimiento de mi abuela, fue internado por cuenta propia, por su puesto que nos negamos, pero decidimos de hacerle caso, con la condición de visitarlo todas las tardes de los Martes y Jueves.

Su historia fue tan grande que tiene su lugar en un museo, impresionante ¿no?, me encanta la idea de que fuese alguien importante y me fascina que halla logrado su sueño, mas bien un hobbit ya que ama viajar y explorar, hedere eso y lo tengo de ejemplo de inspiración , quiero y seré como él, dejare mi huella en la historia además de disfrutar de hacer de algo que me gusta en mi vida.

Lamentablemente soy demasiado joven, con 15 años no tengo permiso de coger mis cosas y viajar a otro país, además hay escuela, etc,muchos otros factores que me impiden lograr lo que quiero ser.

—Ahh-bosteso,—Tanta charla y tengo que ir a la escuela, espera..¿Qué hora es?.., 9:47am¿pero que..cara..?

De un solo golpe me levante y vestí, baje rápidamente para alcanzar el baño pero una nota en la mesa capto mi atención.

—Hija, recuerda que hoy tienes que ir a visitar a tu abuelo, tu almuerzo esta congelado. En el caso de otra cosa llámame, Mamá.—leí en voz baja.—seguí con movimientos rápidos estaba contra el tiempo, pero aun hací llegaría tarde el bus que me lleva a la escuela solo pasa a las 8:00am, y la próxima vuelta sería a las 12:30am,luego de muchas vueltas por la casa, salí de ella y comencé a caminar pero fusionado con una corrida, mis pasos eran enormes y si alcanzaba a llegar era para la clase de biología y no me agradaba.

—Señorita McKinley, no me sorprende su hora de llegada,—dice la inspectora en un tono serio, tampoco me agrada.

—la alarma no sonó,—dije como justificación pero en realidad estaba pensando en la biografía de mi abuela en vos alta,-¿Puedo pasar?.

—Si, pero es la ultima vez, la próxima apoderado, ¿esta bien?.—Dice señalándome con su lápiz bic azul.

—Esta bien.

Entre y corro directo a mi clase, arregle mi pelo antes de entrar y toque la puerta.

—Permiso, buenos días,—Dije mientras corría a mi puesto colgué la mochila a mi respaldo y me senté.

—Buenas tardes serán, Señorita McKinley.—Dice el profesor de biología sin quitar la vista del libro de clases,corrigiendo en presente mi asistencia.

—Prefiero que me llame por mi nombre, profesor Chad.—En ese momento era el centro de atención.

—bueno, Madison,mejor comienza a escribir que esto es para examen.

Comencé a escribir y al terminar mire la hora, los día Martes, la jornada es mas corta por lo cual hiría a estar mas tiempo con mi abuelo.

—Bueno, chicos nos vemos mañana espero que estudien, ya pueden retirarse.—Dice el profesor de biología.

Me aliste rapidísimo y di dos pasos cuando el profesor me llama.

—Madison.

Di media vuelta y con cara de puchero respondí,—Diga Me profesor.

—En el tiempo que no estuviste de clases, di parejas para el trabajo de investigación, toma,—Me entrega un papel con mi pareja.

—Gracias, ahí me pondré al día.—Me retiro corriendo.

De que entre a esta escuela es uno de los profesores con los que tengo más cercanía, manejo no muy bien su asignatura pero tampoco estoy que repruebo.

Ya en la calle comienzo a caminar hací el asilo, de pasada compro algo de comer y el diario que mi abuelo siempre pide.

Cuando salgo de la escuela

Al llegar entro y voy fondo del pasillo doblando a la izquierda, sala 28.

—Permiso,—Dije con voz dulce.—Traje el diario.

—Pase mi niña, ¿Vienes por más historias?,—Dijo cómicamente.

-Pues si, jaja-Mi risa marco una sonrisa en su rostro.

Se acomodó en su cama, sentándose y apoyando su espalda en el respaldo con la almohada de amortiguador.

-¿Por dónde empiezo?,-Dijo sobando su barbilla.-ya te conté sobre el libro mágico.

Mi cabeza retumbo al escuchar la palabra mágico, haciendo me cuestionar si hablaba en serio.

-¿Mágico?- Dije abriendo mis ojos demostrando interés.

-Si, lo encontré en las cavernas de México en agostó del 93, todo comenzó cuando aquella me atrajo y me aventure a explorarla, baje hasta no tener luz natural y Prendí mi linterna, brillaba como el mismo sol, era hermoso cuando lo habría fue lo mejor nunca quise revelarlo a la prensa o el gobierno,- lo interrumpí.

-¿!Pero que lo hace mágico!?-Dije muy interesada, y de manos en las mejillas de apoyo.

-Es que predice el futuro,-dijo en susurro.-Al tocarlo modifica su visión para ver a quien predesirlo.

-Es imposible-Dije segura y casi quitando interés.

- Es real, además quería obsequiar te, lo siento que ya no me queda mucho tiempo y es lo único que me queda en manos, que da evidencia de mis aventuras, y como mi única nieta, es tuyo,-Dijo un poco melancólico.

-Gracias,-Quede atónita, fue una sorpresa además si realmente funciona, las posibilidades de que mi futuro sea mas certero con grandes.

-Ve, a la casa mía y sube entretecho en una caja café envuelto en diario estará,-Esta ves podía creerlo por el tono de su voz.-¡Corre!.

De pronto esto se volvió una aventura, cogí mi mochila y corrí por los pasillos llegando a la salida, pero entrada de mi aventura, la casa de mi abuelo quedaba dos calles mas atrás de la mía , corrí sin pausar hasta llegar a ella.

Vacía y deshabitada...

Hola, quisiera saber si te gusto con un voto o cometario para saber si quieres que siga.. :3

Connii.