La Propuesta

Cap.1

Narra carlie
En estos dias mi madre ha estado muy rara conmigo , esto no me gusta... Ultimamente trae a puro señor de su edad o mas grande que ella, & dice que debo dejarme que haga lo que ellos quieran hacerme excepto que tengan relaciones conmigo, me entristece que mi madre sea asi conmigo cuando yo no le he hecho nada, nadie sabe de esto mas que Rob ya que con el me puedo desahogar & siempre me dice que pronto todo esto acabara , nunca entiendo a que se refiere...
Me levantè, eran las 7:15, era un dia normal para mi, día de clases era viernes asi que me levante & me estire, fui por mis cosas para meterme a bañar, cuando salí me empeze a cambiar & me puse un crop top color negro, un pantalón de mezclilla & mis converse negros y mis rulos sueltos, me puse un maquillaje ligero & agarre mi mochila, me dirijí a la cocina para desayunar & mi mama ya se había ido & como siempre no me hizo nada & no tenia mucha  hambre, así que espere a que Robert llegara por  mi ya que el siempre se ofrecía a llevarme en eso sonó mi claxon & salí, vi su carro deportivo negro abrí la puerta & entre.
- hola Rob, ¿ Como estas?- le di un beso en la mejilla
- hola pequeña bien ¿& tu?
- bien

-sabes? hoy no iras ala escuela, tengo un día planeado para los dos pequeña.

yo no era una chava matadita para los estudios y no tenia ganas de ir a la escuela, asi que acepte, acabo  no pasaría nada con que faltara un día.

-claro! ¿a donde iremos?

- primero pequeña ¿ya desayunaste?

-nop

-ahora ¿Por qué ?

- por que...- ahora que le decía - por que recién baje de mi cuarto

-hay pequeña ¿que voy ha hacer contigo?

-¡quererme!

-eso ya lo hago pequeña (;- y me revuelve el cabello

-no hagas eso!! sabes que lo odio-.

Después de 5 minutos me llevo a un restaurante, el cual era mi favorito, pedí unos huevos estrellados con unas quesadillas y una malteada de fresa, y el pidió los mismo que yo, después de haber desayunado mediante bromas anécdotas salimos y me dijo:

-¿ te gustó el desayuno pequeña?

-sipe- lo abraze, por la cintura ya que el media casi el doble que yo

-ahora vamos a ir a un lugar muy especial y que te encanta a ti, pero antes que nada necesito que te cubras los ojos- y me puso un  paliacate y me tapo los ojos, me subió al carro y como no veía nada solo oí que encendió el motor y sentí el movimiento del carro, Robert puso musica y  nos pusimo a cantar como locos.