||How to love a girl in one month|| 《JeonJungKook》

003

By: HanAh

Después del instituto, una pequeña platica con Sana y rendirme al ver como HoSeok y JiMin se llevaban a mi hermano a saber donde, me dirigí a casa lo más rápido que pude, eran las 4.00 pm y con suerte llegaría a cambiar mi uniforme e ir corriendo al edificio de JungKook.

Y dicho y hecho, llegue a casa 4.20, gracias a dios no vivía lejos del instituto, con una rapidez que hasta Flash envidiaria, cambie mi falda y suéter por unos jeans azules rasgados, una playera negra y unas zapatillas vans, igualmente negras, aunque cambiarme fue rápido, no contaba con que en la TV estuvieran pasando una película llamada "Una chica fuera de serie", la cual me mantuvo clavada hasta que miré el reloj y... Mierda, ya eran 5.30.

By. JungKook

Al terminar la escuela rechace la invitación de los chicos por ir a jugar con la consola de HoSeok solo para estar con HanAh, aunque no la vi en lo que resto del día, me sentía especialmente ansioso por volver a estar con ella a solas aunque solo fuera por una tarde.

Al llegar trate de acomodar lo mejor que pude mi regado departamento, no sabia porque pero quería impresionarla. No tarde mucho en mi tarea, media hora quizá, y confirmándolo con el reloj de la pared que marcaba las 4.35 pm, me dispuse a esperar.

El reloj marcó 5.30 y mi paciencia ya se había acabado, ¿Acaso no le dije que la queria aqui puntual?, enojado y algo... ¿Decepcionado? ¿triste? quizá; camine hasta la cocina buscando algo de comer hasta que escuche el timbre sonar y al instante mi enojo se esfumo como por arte de magia.

-Y-yo... L-lo sien...to

Dijo una HanAh roja y jadeante por lo que supuse fue una carrera de su casa a mi departamento, eche un vistazo al reloj de mi telefono mostrando a su expresión de cansancio.

-Llegas 40 minutos tarde.

-Ya dije que lo siento.

-Y yo dije que te quería puntual, esto te costará mucho, pequeña enana.

Murmure maliciosamente dejando pasar su delgado cuerpo, a lo que ella de inmediato comprendió y yendo hasta el sofá, se desplomó en este abanicando su cara con una revista playboy que había en este.

-Pues parecía que estabas entretenido.

Dijo mirando con cierta diversión la revista, dejándola con una mueca de asco en el suelo, decidió abarcar su cara nuevamente ahora usando sus manos.

-No sabes cuan bien lo estaba pasando.

Mostré mis dientes en una sonrisa que amas de una lograba sacar un suspiro, caminando hasta sentarme a su lado, vi con curiosidad su cabellos revuelto y no pude evitar centrar mi total atención en ella.

-Como sea, solo terminemos con esto, ¿Si?

Se acomodo mejor poniéndose a una distancia considerable de mi, soltando un bufido de molestia, me recargue en el respaldo colocando mis manos en mi nuca y cerrando los ojos.

-Bueno, tu eres la maestra, ¿Qué se supone que debo hacer?

Pareció pensarse que hacer o decir, porque en los próximos 5 minutos no hablo hasta que abrí mis ojos.

-¿Y bien?

-Mh... Buenooo.... A Sana le gustan los perros, ¿Por qué no le regalas uno?

-¿A ti te gustan?

-No, prefiero los gatos.

-Entonces no creo que un perro sea buena idea.

Vi su expresión volver a confundirse y ahora girando su cuerpo hasta quedar frente al mío de costado, frunció su ceño nuevamente.