Prólogo

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París, la ciudad del amor. Ese era el hogar de un grupo de niños que se conocieron a una corta edad y se convirtieron en amigos cercanos, que lo compartían todo.
Alya, una niña observadora que hacía todo tipo de preguntas y cuestionaba cada afirmación con la que estaba en desacuerdo. Nino, alguien a quien la apasionaba la música, a su corta edad ya había aprendido a tocar batería y guitarra. Marinette, hija de una madre soltera, era una prodigiosa en el diseño y la creación de prendas de vestir además de ser la maestra en los videojuegos. Adrien, el hijo del diseñador más famoso de París, quien lo obligaba a participar en una que otra de sus campañas publicitarias, un chico atento y amable que en el fondo ocultaba una personalidad bromista y picara.

Estos niños se juntaban cada vez que tenía la oportunidad para jugar, hablar y pasar el rato. Marinette y Alya fueron las primeras en conocerse, ellas estudiaron en el mismo jardín y se volvieron amigas desde el primer día. Por otro lado la madre del muchacho rubio le pidió a su esposo dejar al pequeño ir a la escuela a lo que su padre accedió, fue allí donde conoció a Nino, y aunque no era bueno tratando con gente debido a su previo aislamiento. Ellos lograron crear una relación que perduró hasta la primaria, donde conocieron a las otras dos niñas y crearon un grupo, haciendo un juramento de amistad eterno.
Sin embargo con el tiempo Marinette empezó a darse cuenta que su relación con Nino estaba cambiando. Todo desde ese día, desde esa mutua confesión.

Nota del autor:

NO ES LO PARECE
O tal vez si...
La única forma de saberlo es seguir leyendo, entonces sí les causó un poquito de curiosidad, pues, VOTEN, ok no pero díganme si debería continuar con la historia o es muy cliché o yo qué sé

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⏰ Última actualización: Jul 02, 2016 ⏰

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