capitulo 2

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Me levanté e hice el desayuno fui a despertar a mi madre pero no estaba en su cuarto lo cual ya no me sorprendía. Bajé a ver al incinerador pero no estaba ahí y me pareció raro. Comense a sentir que algo me observaba a lo lejos en la esquina y me asusto pensar que era el ladrón del día anterior. Comense a acercarme negando todo lo que aprendí en las películas de terror. De repente di un salto y escuche las patitas corriendo, era una rata. Eso me hizo darme cuenta que tenia que
Necesitaba revisar la casa en caso de que halla un nido. Un grito me desvía de mi pensamiento, reaccionó y subo corriendo era mi madre ella estaba en problemas.
Mi madre estaba en el piso, el maldito corrió por el pasillo y salió de la casa corriendo. Pero en ese momento no me importo, tome mi teléfono y llame a una ambulancia.

Pasaron 7 minutos y aparecieron se llevaron a mi madre.

Me vestí y fui al hospital, llame al trabajo que mi madre estaba en el hospital y no podría ir.
Mi jefe contestó y creí que todo iba bien hasta que un médico se acerca con mirada compasiva, la cabeza gacha, y una mueca de tristeza.

En es momento tenia la duda de si temer lo peor o pensar que venía hablar con la mujer sentada a 3 bancos. Era una anciana creo que tendría unos 57 o algo así , se veía cansada como si tuviera ya varios días aquí supongo que por un tratamiento o por algún familiar internado. Volví a enfocarme en el médico y comenzó a acercarse a mi.

- ¿Will Scarlet?- Dijo con firmesa
-aqui!-di un brinco parándome bruscamente
-tenemos que hablar, su madre está bien pero necesitará una cirugía de cadera porque sufrió daños en la cadera izquierda-en ese momento sentí un alivio muy grande.
-el problema es que cuesta $2000 pesos una cirugía tan compleja.
-no hay problema con el dinero
-perfecto comenzará a las 7:35 horas tiene tiempo de sobra para hacer el trámite
-disculpe doctor, podría ver a mi madre
-si claro, sabe tubo suerte de que la casera no la asfixie el elevarse de esa manera

Caminé y pase la puerta tembloroso, ella estaba bien más relajada que yo aunque me parecía raro porque ella odiaba los hospitales.
-su madre tomo un calmante para no estar tan nerviosa. En ese momento entendí varias cosas.
-genial, porque no le gustan mucho los hospitales y con esto de la esquizofrenia es peor el odio.
El médico soltó una risa entre dientes pero al momento se piso serio. La sala era compartida porque no tenían muchas salas en el hospital entonces no estará sola hasta después de la operación. No era muy grande pero tenía buena tele y un sillón que tenia pinta de ser cómodo.
Bajé a hacer el trámite y todo fue perfecto no había mucha cola, la señora que me atendió era bastante amable no como el de al lado por lo que escuché.
Volví a subir y me encontré a mi supervisor.

-hola
-hola ¿que te trae por aquí Will?
-mi madre está internada y hoy la operarán. ¿y usted?
-Yo vine a visitar a un colega que le sacaron el apéndice.
-que se mejore
-igual tu madre, adios
-hasta luego

Entre Dos MundosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora