Para Daphne la vida amorosa a sido un completo desastre desde qué David, un chico gordito e irlandes se acercara a su casa y le diera un besito en la mejilla delante de su seis hermanos varones. Pobre David, pobre la factura del dentista. Desde ese día con solo 8 años sus hermanos se convirtieron en los guardaespaldas de su pequeña Daphne. A cada chico que se le acercara aún que solo fuera por un trabajo de clase era sentenciado a las humillaciones de los Daltons y aunque Daphne los intentara para no había manera de pararlos.
Hasta esa mañana lluviosa de diciembre cuándo un chico alto, de ojos claros y cabello castaño se instaló en la casa de al lado de los Daltons. Daphne cómo cualquiera chica de dieciséis hormonada se quedó prendidamemte.....
Stop! ¡Paren a la escritora!
¿Quien dijo enamorada?Recapitulemos. Daphne cómo cualquier chica de dieciséis hormonada odio a ese castaño desde la cabeza hasta...¡el corazón!.
Al principio los hermanos no le tomaron encuentra pero cuándo se presentó a la casa de su pequeña hermana lo odiaron. Pero después lo amaron con todo su ser.
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-Daaaaaaaaahpne.- Dahpne miró a sus hermanos que no se movieron ni un milímetro al escuchar el timbre de la casa
-Ya voy, ya voy par de vagos.- se acomodó su pijama de Flash y se puso sus gafas.
Abrió la puerta y cómo si fuera un gran puñetazo, el frío de invierno le dio un puñetazo.- Joder que frío.- se frotó las manos y miró al causante de su desgracia. Chico, de aspecto juvenil, cabello castaño y ojos claros.-¿Si?.- el chico levantó los ojos del teléfono para mirarla.
-¿tu eres un tio?.- Daphne abrió la boca indignada apretó los puños y lo miró.
-No, pero me puedo convertir en uno para romperte la cara.
-Tranquilo hombreton.- todos los hermanos de Daphne la miraban esperando algo de ella.
-Idiot accursed.- pronunció en su idioma natal. El chico sonrió y ella pudo fijarse en el piercieng que tenía delante los diente superiores.
-Me gusta esa palabra, ¿qué significa?.
-Maldito idiota.- cerró la puerta de un gran portazo. Le dio igual la puerta, sus hermanos chismosos.
Lo único que pensaba era en que iba a vivir a tres metros del idiota