Hoy era el día, estaba nerviosa, asustada, ilusionada.
Junto a Alix, cuando terminamos de desayunar nos preparamos, cogimos nuestros artefactos, porque claro y si nos encontramos con ángeles, no íbamos a desperdiciar esa oportunidad de matarlos.
Esas inmensas puertas que separaban el mundo mortal del inframundo.
-Eh, preciosa cada día estás mas pelirroja.
-Yo también me alegro de verte.
-Erin lista. Me llamó mi padre.
-Si.
-Abran las puertas. Grito mi padre.
Los inmensos portones comenzaron a dejar pasar una tenue luz, puesto que estábamos en el alba.
Di un paso y los demás también lo hicieron. Yo los dirigía. Y si fallaba.
-Nuestra primera vez. Grité.
Y un montón de gente empezaron a gritar de alegría.
Una vez fuera los enormes portones se cerraron, y una voz comenzó a sonar.
-Tres días tenéis para estar fuera.
Todos comenzamos a discutir entre todos sobre quién nos dirigiría.
-Madison serás buena, pero yo soy mejor.
-Hagamos una cosa. Dijo Madison. Los que se quieren ir contigo, pues contigo, y los que no, conmigo.
-Me parece bien. Dije un poco cabreada.
Y rápidamente nos dividimos en dos grupos.
Conmigo eran 8 personas y con la zorra de Madison cooper 10.
-Serás la hija de Jack Thomson, pero me prefieren a mi.
...
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Cuando El Infierno Se Congele...
Science FictionAlguien podría ser mas malo que un demonio, no puedes saber lo malo que es una persona ,por mucho que lo conozcas siempre podría sorprenderte .El nacimiento no determina lo que eres, pero si tus actos. Yo soy así porque me criaron de esta forma, así...