LEA POV:
Lunes, ese día el cual todo el mundo odia y nunca desea que llegue.
Pobre lunes, me compadezco por él siendo una de las únicas personas a las cuales le gusta. Puede ser que me guste porque tal vez no haga nada en mi vida y los fines de semana se basen en ayudar a mi madre a arreglar el jardín y por la tarde estar con mi abuela preparando bizcochos. No me malinterpretéis, las adoro a las dos, pero comprended que se hace muy repetitivo y la rutina aburre.Tic, tac, tic, tac
Aquí estoy, clase de matemáticas a primera hora.
Nunca me han gustado las matemáticas y nunca un profesor me ha hecho amarlas. Tampoco me ha gustado ningún profesor de matemáticas. Todo tiene sentido.
Ahora mismo me encuentro en el típico estado de trance el cual mi profesora de francés lo define "estar en la parré ". Se que esa expresión no existe en francés, pero si, estoy en la parra.El panorama que abunda en mi clase es: el grupo de las palmeras en segunda fila cuchicheando de cualquier cosa.
Las llamo así ya que todas son las palmeras de Julie, la típica chica malcriada la cual es guapísima, pero esta podrida por dentro.
Mi relación con ellas es como la del pino y un tornillo. Exactamente ninguna. La indiferencia que sentimos mutuamente es real, así que ningún problema.
Ellas están como siempre sin atender al profesor. No las puedo culpar, yo tampoco lo hago. Exactamente creo que nadie le presta atención, menos Paula, ella sí. Creo que es superdotada.Siguiente grupo son los frikis de la clase. Las mejores personas que he conocido en mi vida. Luego está el típico grupo de chicos que... Digámosles que están muy bien y alegran la vista. Eso si, la mayoría son muy cabrones.
Proseguimos con Peter, ha venido nuevo de Escocia y no habla mucho, pero parece buena gente. Pilota muy bien el español, creo que me dijo que su madre era de aquí.
Aún así no hablamos mucho, me da rabia porque parece un chico muy interesante. La frase más larga que me ha dicho es: Oye, ¿podrías agachar un poco la cabeza por favor? No veo muy bien la pizarra.
Yo la agaché por supuesto.
Es curioso pero todo el mundo me tacha de ser muy buena gente. No me puedo quejar. También puede ser que me describan así porque no se decir que no.
Creo que si el demonio se me presentase en persona y me pidiera que le diese mi alma no me podría negar.Para finalizar estoy yo y Dani. Danielle para ser más exacta.
Qué decir de Dani, vale millones esa chica. En clase somos como uña y carne. Inseparables.¿ Y como nos conocimos ? Digamos que las dos somos repudiadas del grupo de las palmeras. Nos cansamos y volamos del nido. Y ahora somos más felices que dos perdices.Riiing, riiing
Por fin, se acabó matemáticas y acabo de descubrir que mi clase es completamente un cliché.
Odio los clichés.
Odio mi clase.
Me encanta que todo concuerde y mi universo esté en orden.Peter POV:
Lunes, odio los Lunes. Ojalá no existieran, pero si no existiesen, los lunes serian los martes y se convertiría todo en un círculo vicioso... Así que mejor pensado, voy a intentar amar los lunes.
Pero es imposible teniendo matemáticas a primera hora. No me entero de nada y los frikis que tengo detrás no paran de lanzarme trocitos de goma. Son cabrones pero aún así me caen bien. Adoro la espontaneidad que tienen.
Un día me dejaron un boli azul y acabaron hablándome de la teoría de como puedo demostrar que todos nosotros vemos los colores de la misma manera y no si ellos ven el rosa como yo veo el verde y cómo podía describir los colores. La verdad me confundieron bastante.
Otra palabra para definirles seria convincentes y muy peculiares. Pero como se suele decir, lo bonito está en la diversidad.Otras personas las cuáles me caen bien son Dani y Lea. Podría contar con una mano las veces que he hablado con alguna de ellas. Lea en lo particular me parece una chica con una sonrisa muy bonita, la cual también no siempre muestra felicidad. Creo que tiene un fondo muy rico, digo, no habla demasiado y parece que en todo momento esté pensando en algo. También es un poco tímida , al contrario de Dani, una chica con carisma rebosando por cada poro de su cuerpo con una risa bastante contagiosa.
Desde que llegué aquí hará tres meses, han sido una de las únicas personas las cuales me han hablado y han intentado que esté lo más cómodo posible, lo cual agradezco mucho.
Algún día tengo que atreverme a volver a hablar con ellas. Siempre me falta iniciativa en hacer las cosas.Riing riing
Dios mío, ese bicho de timbre siempre me asusta cuando suena, ojalá lo cambien de una maldita vez.
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filofobia.
Teen Fiction- Deseo que pudieses escuchar todo lo que no me atrevo a decirte. La otra noche tuve el valor de ir a decírtelo. No me abriste la puerta.