Una noche (TaeNySic, YulSic, Jeti + Lemon+M16)

1

- Tae, Taeyeon ah, no... me estas excitando – murmuró bajito Jessica, mientras Taeyeon la besaba en el pecho y masajeaba sus senos a placer 

- ¿Hay algún problema con eso? – preguntó Tae pasando a besar apasionadamente los labios de la princesa de hielo, siendo correspondida inmediatamente, para luego ser rechazada a los pocos segundos - ¿Es que ya no te gustan mis besos, Jess? – volvió a preguntar Tae a la chica que desde hace algunos meses había aceptado ser su novia, pero que, aparte de los besos y las caricias, no había querido que eso pasara a mayores

- No, es eso... tú sabes lo que es... tengo miedo Taengoo – la bajita se separó bruscamente y se sentó a su lado con las cabeza entre las manos 

- Yo también Jess, pero me estoy cansando de que seas mi novia solamente de palabra, incluso cuando te toco levemente siento tu rechazo

- Tae, yo no... no quiero... - Tae la encaró con una expresión dura en el rostro y unas cuántas lágrimas rodaron por sus mejillas 

- Siento que mi amor por ti se desvanece, Jessica. No sé qué hacer, dices que te hago feliz, pero no lo parece – exclamó poniéndose de pie y sollozando suavemente – Quiero que esto se termine... 

Esa escena que ya creía olvidada había estado rondado por mi cabeza desde hace algunos días. Oh si, recuerdo cuando fue que empezó. Fue al final del comeback de "I got a boy". Ver a Taeyeon y a Fany tan felices debería alegrarme, pero cada día que pasa siento más y más envidia de Stephanie. ¿Por qué no puedo olvidar a Taeyeon? "Jessica Jung, Yuri te hace feliz, ella es la mujer para tí" pienso constantemente para olvidarme de esa enana pervertida. Pero no puedo, siento que algo me falta.
- ¡Hey Jung! ¿Estás en la tierra de los sueños? – Hyoyeon era siempre la testigo de mis ensoñaciones. Me limité a sonreírle tímidamente - ¿Te sientes mal?
- No, es solo que me siento cansada – mentí
- Te entiendo, todas nos sentimos así con esto del comeback. Vámonos – me tomó de la mano y me alejó de la escena que estaba observando. Tiffany y Taeyeon, la pareja perfecta, se comía a besos en un rincón oscuro del escenario después de cantar "Lost in love". 

Llegamos al departamento después de un corto viaje y una cena móvil en la camioneta. Los de las hamburguesas se olvidaron de mis papas fritas

- Ten Jess, toma las mías 

Yuri vino a mi rescate como siempre, es tan tierna y dulce. No pude evitar acariciar su rostro para agradecerle. Últimamente, no hablamos mucho. Esa misma tarde, había visto su bien formada figura al tomar una ducha, es hermosa, deseable. Me excita, me provoca muchas cosas, pero no he podido entregarle mi ser plenamente. Es esa pequeña lasciva de nuevo la que me carcome los pensamientos.

Algunos días después del incidente, tuvimos un día entero libre, bueno, todas excepto Taeyeon que se fue a grabar una canción para un nuevo dorama. Ya era tarde, por lo que empecé el día con la primera taza de café a las 9 y media de la mañana. Estaba sirviéndome el café cuando Tiffany se me acercó con unos de chocolate. 

- ¿Quieres uno? Son para desayunar – dijo ofreciéndome la cesta mientras picaba uno

- Claro, gracias – tomé uno de los más grandes y me senté en el comedor junto con ella. Fany dio un sorbo a su vaso de leche 

- ¿Hay algo de lo que quieras hablarme Jung? – me preguntó en inglés con un tono muy serio. Obviamente no quería que las demás se enterasen de nuestra conversación 

- No, en absoluto 

- Pues yo si necesito que hablemos, pero no aquí – asentí levemente mientras comía mi desayuno
- ¿De qué quieres hablar?
- Tú sabes de que. Te veo en el parque de los cerezos en una hora – me contestó levantándose de su asiento.
Me preparé y emprendí camino hacia el lugar de la cita. Yul aún dormía por lo que todo fue más fácil, no quería que me inundase con preguntas. Ahí estaba Fany, sentada en una banca del solitario parque cubierta hasta los pies por un abrigo de piel sintética color negro mirando hacia el piso bajo sus pies. Había cambiado mucho desde nuestros días de trainee. Ambas habíamos cambiado. Me senté a su lado, me sentía extraña porque no era capaz de mirarla a los ojos
- Sé que nos viste, Jess – Fany interrumpió el incómodo silencio, su expresión era seria sin apartar su vista del piso
- No sé de qué me estás hablando – Fany sonrió levemente
- No mientas – dijo mirándome, pero yo seguía demasiado avergonzada como para devolverle el gesto – Sé que cuando miras a Tae no lo haces con sentimientos de amistad. ¿Acaso no puedes olvidar lo que tuvieron juntas? – dicho comentario me impactó mucho fue entonces cuando tuve el valor de mirarla a los ojos
- Tú, ¿Cómo puedes?---
- Tae no guarda secretos para mí – ahogué en mi rostro una mueca de enfado. Se me antojaba dejarla ahí en el frío para que se congelara, pero su expresión era impasible
- No importa – respondí mirando de nuevo al piso – No pienso decir nada igual, se que a manager nim se le deben ocultar ciertas cosas
- No te cité aquí por eso
- ¿Qué quieres decir?
- ¿Aún quieres a Taeyeon? – era la pregunta que me había temido todo ese tiempo, ni siquiera había sido capaz de contestármela a mí misma, mucho menos iba a contestarle a la chica que ahora ocupaba el corazón de mi ex novia. Inconscientemente, entré en actitud defensiva endureciendo mi rostro frente a ella
- ¿Qué clase de pregunta es esa? Yo estoy con Yuri ahora
- Contéstame. ¿Aun quieres a mi chica? ¿Sientes celos? ¿Qué me responderías si te dijera que me hizo el amor ahí mismo mientras nos veías? – "Sentiría mucha furia y ganas de golpearte" fue lo que pensé inmediatamente. No podía creer que me estaba contestando esa terrible pregunta. Aún sentía algo por TaeYeon. Pero, por supuesto, no podía dejar que Fany averiguara mis verdaderos sentimientos
- No me importa Stephanie – le contesté secamente - ¿Por qué habría de importarme? – dije abrigándome con más fuerza y levantándome del asiento. Fany me encaró enseguida
- ¿Qué quieres con ella? – dijo tomando mi muñeca izquierda para detenerme. Me estaba lastimando, no sabía que tan fuerte o celosa podía Fany llegar a ser
- Nada, te he dicho que estoy con Yuri – me solté de su agarre y me di la vuelta en dirección al apartamento.
No volví a hablar con Fany desde esa plática que tuvimos. Sentía mucha rabia hacia ella, podía sentir su mirada penetrante cada vez que mis ojos desviaban su vista hacia Tae. La tocaba y besaba descaradamente frente a mí tratando de atormentarme cada vez más. Estaba empezando a odiarla de verdad.
Un día, al salir de la ducha, Yul entró inocentemente a nuestra habitación y alcanzó a tener una vista de mi cuerpo desnudo. Se sonrojó de inmediato mientras me recorría con la mirada de arriba hacia abajo, haciendo que yo también me sonrojara. Ese instante solamente duró lo que tarde en colocarme una toalla alrededor y voltearme dándole la espalda a mi chica. ¿Qué clase de persona hace eso? Yuri había desviado su mirada y tapaba sus ojos con su mano izquierda
- Lo siento cariño, sé que no debo...
- No es tu culpa Yul – le respondí vistiéndome con la ropa que tenía preparada. Idiotamente me sentí culpable por ello. Me senté en la cama ya vestida y pude sentir el abrazo cálido de Yuri en mi espalda. Olía tan bien, es muy femenina, eso es lo que me encanta de ella. Hubiese querido arrojarla a la cama y permitir que me tomara, pero por alguna razón no podía hacerlo. Le había hecho prometer que no me vería desnuda hasta que me sintiera lista para tener sexo con ella. De eso hacía casi un año. Me sentía la peor persona del mundo por dañar a quién más me quería, yo también la quería, de una manera muy particular
- Lo siento Jess, no pude evitarlo. Eres tan hermosa – escuchaba las palabras de mi novia y me sentí volar. Debía hacer algo de inmediato sino quería perderla. Tomé sus manos en mis manos y las besé. Me volteé y la tiré de espaldas en la cama, para luego colocarme encima de ella y abrazarla fuertemente
- Falta poco Yul, muy poco – le mentí refiriéndome a nuestro acuerdo
- Yo esperaré, esperaré – dijo apretándome más a su cuerpo. Me sentía increíble estando con ella, pero cada vez que ella me abrazaba yo la reemplazaba en mi mente con la imagen de mi primer amor. Tenía que hacer algo.

Esa noche no pude dormir bien. Yuri estaba extrañada porque consiguió conciliar el sueño antes que yo y me tomó una foto para que las demás le creyesen. Me hizo mucha gracia y saludé cortésmente a la cámara. Sentí envidia de ella en ese momento, era tan bella y pura. Salí de la cama y me acerqué a la ventana que daba una hermosa vista nocturna de Seúl. Me cubrí con una sábana y subí hacia la terraza de nuestro edificio. Hacía mucho frío, pero me sentía desesperada. Las quería a ambas y eso no podía ser. Miré al cielo y rogué con todas mis fuerzas una solución. De seguir así, iba a explotar y eso no sería bueno. De pronto, una alocada idea surgió en mi cabeza
- Podría funcionar
Me dije a mi misma tratando de controlar mi emoción. Era definitivamente una locura, pero tendría que intentarlo. Regresé a mi habitación mucho más tranquila de lo que me había sentido en mucho tiempo y abracé a Yuri antes de quedarme completamente dormida.
Medité esa solución en mi cabeza y sus posibles consecuencias una y otra vez. Después de una semana, me llené de valor y enfrenté a Fany a la salida de uno de nuestros ensayos.
- Necesito que hablemos – le dije en inglés
- Ya dijiste todo lo que tenías que decir – contestó secamente alejándose de mi
- Por favor – dije tomándola del brazo para detenerla, volvió a mirarme y no tengo idea de que expresión tenía en mi rostro, pero debió haber sido lo suficientemente convincente como para que accediera
- Muy bien, pero no aquí. Vamos a la terraza
Durante todo el camino a la terraza, ninguna de las dos dijo nada. Yo por la preocupación que me llenada, pero no tengo idea de que estaba pasando por la cabeza de Tiffany en esos momentos. Llegamos y se puso frente a mí con los brazos cruzados en posición defensiva
- Te escucho
- ¿De verdad quieres saber que quiero?
- Sí, quiero saberlo
- Pues bien, te lo diré. Si, si la quiero. Quiero a Tae – los brazos de Fany bajaron inmediatamente y su rostro se volvió inexpresivo – La necesito Stephanie. No sabes lo que se siente saber que dejaste ir a tu primer amor solo porque tenías miedo de amarla más que a tu propia vida – el ya nublado cielo de Seúl comenzaba a resonar anunciando una inminente lluvia. La expresión de Fany se convirtió en una mueca de dolor
- ¿Y eso que me importa a mí? – respondió conteniendo unas lágrimas y elevando el tono de su voz. En ese momento, gruesas gotas de agua comenzaron a caer sobre nosotras empapándonos de pies a cabeza
- La necesito Fany... debes dejar que esté con ella, aunque sea solo por una noche – contesté elevando mi tono de voz debido a la lluvia
- ¿Realmente piensas que voy a dejar que te acuestes con mi novia así no más? ¿Qué te has creído? En verdad eres una princesa de hielo – me gritó con enojo
- ¡No, no lo soy! Yo solo necesito cerrar el ciclo que nunca cerramos, necesito estar con ella para poder seguir con mi vida. Quiero a Yuri, la quiero. Necesito terminar esto para hacerla feliz
- ¡Nunca! No vas a tocarla ni a disponer de ella como si fuese un objeto
- Entonces mi mirada seguirá posándose sobre ella, deseándola y queriéndola en silencio. ¿Eso es lo que quieres? – Fany se me acercó y me abofeteó dejando mi rostro ardiendo enseguida
- Eres un monstruo – dijo abofeteándome de nuevo, justo antes de que tomara sus manos y le respondiera con un movimiento igual. Se llevó la mano derecha al rostro y me miró horrorizada. Sus ojos se aguaron y enrojecieron, y por su rostro se deslizaron sendas gotas de agua que no sabría diferenciar entre lágrimas o lluvia. Yo también comencé a llorar y me acerqué a ella suplicante tomándola por los hombros
- Por favor, Tiff, te lo ruego. Debes dejarme hacerlo con Tae. Si se lo pido a ella sé que no lo hará, te adora y jamás haría algo para dañarte. Es por eso que te lo pido a ti. Ayúdame por favor... ella hará lo que le pidas – Fany me miró, era la mirada de una mujer celosa que no estaba dispuesta a hacer lo que le pedía, pero luego esa mirada cambió a una expresión de comprensión y compasión
- Tengo que pensarlo – dijo mirándome a la cara – No puedo hacer más por el momento
- Gracias – la abracé, pero ella no me correspondió el gesto. Unos segundos después me empujó lejos y bajó de nuevo las escaleras de la terraza.

Fany entró de un portazo en la habitación que compartía con su novia. Taeyeon, que estaba acostada en la cama, se sobresaltó al ver a su chica mojada de pies a cabeza. Se levantó con una toalla en la mano empezando a secarla y a quitarle la ropa mojada hasta dejarla en ropa interior
- Me preguntaba dónde estabas. No contestaste a tu móvil, llamé muchas veces. ¿Qué ha pasado?
- Lo siento cariño – en el rostro de Fany se dibujó un atisbo de preocupación - ¿Puedo preguntarte algo? – dijo volviendo a los años de su infancia cuando le preguntaba algo incómodo a su padre
- Lo que quieras – respondió Tae trayendo más toallas
- ¿Me amas? – preguntó tiritando a causa del frío. Taeyeon se detuvo en el acto y tomó el rostro de su mojado mushroom con ambas manos, besándola con delicadeza en los labios
- Te amo, te adoro, te quiero, te deseo – en el rostro de Fany se dibujó una sonrisa – pero eso ya lo sabías – dijo continuando con su labor. Fany tomó una de las toallas y se envolvió con ella
- Si yo te pidiera algo muy imposible o difícil de cumplir, ¿Lo harías?
- Cariño, sabes que haría cualquier cosa por ti – Fany desvió su mirada al piso
- ¿Aún sientes algo por Jessica?
- ¿Por qué me preguntas eso? – respondió Tae extrañada
- Respóndeme por favor, Tae
- La quise mucho, pero eso ya se terminó. Ahora estoy contigo amor – dijo tomándola por la cintura y dándole pequeños besos en sus mejillas y labios – Te amo a ti como nunca la amé a ella – Fany sonrió complacida, para luego endurecer su expresión
- Entonces necesito que hablemos.

Pasaron tres interminables días desde que tuve esa amarga conversación con Tiffany. El trabajo me distraía, pero no era suficiente para alejar mi mente de esos pensamientos que me seguían perturbando y se hacían más fuertes con el pasar del tiempo. Seguíamos haciendo las promociones del álbum sin parar de un programa a otro. Estábamos saliendo del escenario de Music Core, cuando mi mirada se cruzó con la de Fany y Tae; Ajumma me miró y se alejó enfadada, pero Tiffany se me acercó muy segura y con el rostro serio.
- ¿En verdad quieres hacerlo? – me preguntó jadeante, acabábamos de salir de bailar y estaba recuperando el aliento. Mis ojos se abrieron como platos
- ¿Y tú? – pregunté también recuperándome. Terminó de jadear y me empujó contra una pared. Me asusté demasiado, mi corazón estaba acelerado
- Voy a decirte esto una vez y solo una vez. Taeyeon es mía, es mi novia, va a casarse conmigo en un futuro no muy lejano. No te quiere, solo ha accedido porque yo se lo pedí. Jamás dejaría que estuvieras sola en una habitación con ella, para hacer lo que quieres que pase se haga una realidad, será bajo mis términos. Lo haremos las tres juntas
- Pero --- respondí titubeando
- Es eso o nada, Jung. ¿Aceptas o no? – esa situación jamás había pasado por mi cabeza. Sabía lo celosa que era Fany, pero nunca pensé que accedería a compartir la cama conmigo y Taeyeon. No tuve opción
- Está bien. Acepto
- Yo te señalaré el día y la hora – respondió soltándome y dándome la espalda. Sonreí de oreja a oreja pensando en el momento en que volvería a tocar a Taeyeon, aunque por la mirada que compartimos no parecía estar muy feliz con la idea. No importaba, me sentía feliz. Vi que Yuri salía del escenario y la tomé de la mano arrastrándola hasta un rincón. La tomé por la cintura y me puse de puntillas para besarla. Sorprendida me lo correspondió y me levantó por la cintura unos centímetros del piso para hacerlo mejor. Rozó su lengua con la mía y ahogué un gemido en su boca. Nuestros senos se tocaban y mis pezones empezaban a endurecerse. Era la primera vez que yo tomaba la iniciativa. Yuri tomaba mis labios con los suyos y me apretaba fuertemente a su cuerpo. Nos soltamos debido a la falta de aire. Yuri estaba sonrojada, con sus mejillas muy rojas y me miraba con una expresión de deseo. Se mordió el labio inferior
- ¿Eso de donde ha salido? – me preguntó sonriente sin soltar mi cintura
- Tuve deseos de hacerlo – respondí tomando su rostro con mi mano derecha – Solamente espera un poco más, mi Black Pearl – le dije besándola de nuevo – Solo un poco.