Bleeding Me (Metallica, Jameson)[2da Parte De MFOM]

Capítulo 3: Despidiendo un gran amigo.

James llevaba tiempo mirando su cuerpo pensando como haría para volver a él ya que cuando intentaba hacerlo su vista se volvía negra y su cuerpo se inmovilizaba.

Debo esperar todavía.

Suspiró y se quedó mirándose.

La puerta se abrió y entró Sam.

James la miró con el seño fruncido.

—Hola James— susurró al cuerpo del enfermo —Veo que sigues igual—

Hizo una expresión triste sentándose en la silla que estaba al lado de la camilla.

—Dios, te extraño demasiado— sorbió su nariz.

Está exagerando.

El rubio no creía ninguna palabra de lo que decía, no ahora.

—Me peleé con David— miró sus manos nerviosa —Tenías razón, es un idiota— río sarcástica.

James se preocupó, a pesar de todo era su hermana y debía estar para ella cuando ella lo hizo.

—Lo encontré con otra, pero ya lo sospechaba— murmuró —Jason no quiere hablarme. Lo he llamado a su casa pero al escuchar mí voz cuelga la llamada— mordió su labio.

James recordó la discusión.

—Si no hubieras dicho eso, estarían bien— dijo el rubio. Las palabras se las llevó el viento, sin que Sam pudiera escucharlo.

—Joder quiero que vuelvas— susurró la chica rubia, apoyando su cabeza sobre un costado del cuerpo de James.

Hetfield suspiró.

Yo también quiero volver.

~~~~~

Jason despertó como cualquier día, con cara larga y de mal humor.

Despertó a Lola y desayunaron juntos.

—Papi—

—¿Qué pasa?— se levantó para lavar lo que habían ensuciado.

—¿Por qué tía Sam no viene a vernos?— Jason la miró pensando en que decirle.
No le iba esto de hablar "adecuadamente" para que Lola le entendiera.

—Verás, tía Sam y yo estamos enojados por asuntos de adultos—

—¿Es por papá?— un nudo en su garganta lo hizo tardar más en responder.

—S-sí. Ahora llama a Mylo, debemos ir al veterinario— el estado del perro era grave, no faltaba mucho para que el animal llegara a su fin; algo que destrozaba el corazón amante de animales de Newsted.

James volvió a la casa y vio a su perro, no había notado que en este tiempo se la pasaba tirado en el piso durmiendo.
Mylo al verlo se paró y comenzó a ladrar fuertemente.

Lola llegó y miró a su padre que se agachó a la altura del perro para mirarlo ya que tocarlo no podía.

—Estás viejo amigo— murmuró.

—Papi ¿Mylo está bien?— el perro seguía ladrando y moviendo su cola.

—Él pronto estará en un lugar mejor— sus ojos se habían aguado y podía notarse un brillo en ellos.

Jason entró en la sala y al ver al perro alterado lo acarició para que se calme. Se había sorprendido al verlo ladrar y moverse aunque pronto se agitó y se cansó.

—Vamos Lola, sube al auto—

Todos fueron camino a este pero el perro le costaba caminar. Newsted lo tomó en sus brazos y lo dejó en la parte de atrás del auto, junto a Lola.