~tuve una vaga idea acerca de la "caricatura" que más ha marcado mi vida....este es simplemente una vaga idea, me gustaria que dejasen sus comentarios y sobre todo
perdon por las faltas de ortografía.
=La luna como testigo.=
Se marchó furioso hacia su habitación azotando la puerta detrás de él, su rostro hundido en la almohada tratando de ahogar un grito mudo, no podía creer que su mejor amigo acabara de burlarse de sus creencias "Seguro que el universo te perdonará.". Eran las palabras que daban vueltas en su cabeza, y como si no fuera suficiente pequeños recuerdos de aquella estúpida obra que se hacía llamar de teatro comenzaban a emerger de su memoria, "soy un tonto", recordaba decirse a sí mismo mientras se golpeaba la cabeza con la mano, "¡Te dije que estoy confundida!", fueron las palabras que se apoderaban de su mente antes de oír ese ligero golpe en la puerta.
Aang dio un pequeño brinco en la cama ante el repentino sonido, notó un poco de saliva resbalar por la comisura de su labio, se había quedado dormido, otro golpe le hizo reaccionar, se puso de pie y limpiándose la baba caminó hacia la puerta. La abrió lentamente.
-¿Katara?-Preguntó el chico frotándose el ojo.
-Aang...lamento haberte despertado, es sólo que...bueno...-Los ojos de la morena se dirigieron al suelo.
-Aang yo...-Intentó continuar la chica pero fue traicionada por sus propios sollozos.
-Katara...no llores-Dijo el chico tomando su mano para atraerla a un fuerte abrazo.
No soportaba verla así, aunque ya la hubiese visto llorar en varias ocasiones definitivamente no era algo a lo que quería verse acostumbrado.
-Aang...¿crees que pueda dormir contigo esta noche?-Preguntó de golpe.
El pulso de Aang se aceleró tan rápido como llegó a su cabeza la imagen de él y ella...compartiendo una cama...solos...
-Em...claro...-Dijo Aang soltándola, y completamente sonrojado extendió su brazo hacia la recámara en forma de invitación-Damas primero...-Añadió con una sonrisa nerviosa.
Katara sonrió y entró a la habitación, Aang detrás de ella cerrando la puerta detrás de sí. Devolvió la mirada a la cama para ver como Katara se acurrucaba en uno de los lados de ésta y se volteaba mirando hacia la bellísima luna llena que adornaba el cielo. Una pequeña sonrisa cruzó por sus labios, lo sabía, ella había soñado con Hamma y su retorcida y putrefacta mentalidad pero no tocaría el tema, no quería arruinar este momento. Lentamente camino hacia la cama y se acurrucó a su lado, brazos detrás de su cuello y mirada fija en el techo, la sonrisa firme sobre sus labios pues no podría ignorar el hecho de que estaba ahí, compartiendo una cama con la chica de sus sueños, y no siempre de los más inocentes. Se quedó dormido casi de inmediato.
Un ligero movimiento sobre su hombro le hizo despertar repentinamente. Era Katara.
-Em...¿Aang?...creo que será mejor que despiertes...-Le dijo la chica con una pequeña mueca con la palabra "nervios" escrita encima.
Pasaron unos segundos hasta que logró reaccionar un poco... ¿Y qué le hizo reaccionar?, nada menos que la sensación de humedad sobre las sábanas...y entre sus piernas.
Dio un salto y un fuerte color carmín se apoderó de su rostro mientras salía de la cama.
-¡Katara!...em...yo...digo...tu...bueno... ¡diablos!...lo...lo lamento- Dijo el pobre chico derrotado, definitivamente era la peor noche en la que le pudo haber ocurrido "eso".
Katara notó su nerviosismo y se acercó al avergonzado avatar.
-Aang...no te preocupes...está bien- Dijo con una sonrisa compasiva.
