Infiel [Jicheol]

02.

Han pasado dos o tres semanas desde que Jihoon se ha ido, tal vez más pero Seungcheol ya no quiere contar porque cada vez que recuerda un dolor crece en su pecho.
No ha salido en todo ese tiempo y no recuerda cuando fue la última vez que comió o se baño; no ha ido a la escuela y no contesta los mensajes, ni le abre la puerta a nadie, se siente destrozado y lo peor es que sabe que ha sido su culpa, no debió engañar a Jihoon con Jeonghan, ni con nadie pero se sentía solo en esos momentos... No, se estaba excusándo, se merece su abandono y que no le contesté las llamadas ni mensajes, que no acepte sus regalos y rompa sus cartas.

Marca el número de Jihoon como todos los días, ya sabe de antemano que no le contestara pero ya es rutina, cuelga y vuelve a marcar y así durante una hora, hace el último intento del día, escucha el último timbre y...

-¿Seungcheol?- es la voz de Jihoon y su corazón parado por semanas ahora empieza a latir de nuevo

-Jihoon mi amor

-Seungcheol si te conteste es porque es más que irritante escuchar el teléfono sonar por una hora seguida, carajo entiende la indirecta de que no quiero hablar contigo

-Por favor Jihoon- y por más que lo intenta su voz se rompe y siente el nudo subir lentamente por su garganta

-¿Por favor qué, Seungcheol?

-Por favor perdoname

-Seungcheol- Jihoon suspira- mira ya estoy bien, tu deberías también intentarlo

-No puedo, no sin ti

-Ya Seungcheol por favor dejame en paz

-Dejame verte una última vez

-¿Para qué?

-Por favor- murmura con el teléfono muy cerca

-Esta bien pero tienes que prometerme que después dejaras de llamar veinte veces al día

-Lo prometo- la felicidad lo invade y la sonrisa regresa a su rostro

-Bien te mandare la hora y el lugar por mensaje, ¿cualquier día esta bien?

-Si si claro, Jihoon yo...- el sonido del corte de llamada se hace presente y duele que le haya colgado pero al menos ha aceptado que se vean.

Por fin tiene ganas de vivir así que se levanta a comer, se baña e incluso ordena el departamento, se sienta en la sala con el teléfono en la mano por horas y nada; el mensaje no llega.

Cuando despierta mira el celular en el piso, ¿en que momento se durmió?, el foquito del teléfono esta parpadeando y eso es un mensaje, inmediatamente lo abre y si; es de Jihoon.

"Nos vemos el viernes a las seis y media en el café que esta a cuatro cuadras de la universidad, ya sabes el que es de color rojo y gris.

No llegues tarde.
                                       -Jihoon"

¿Eso es todo? Ni un ¿como estas?, un "te espero con ansias", nada; así tan seco. No contesta porque se le puede salir todo lo que quiere decir y ya no tendría caso la cita.

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Llega el tan esperado viernes, esta semana ha regresado a su vida normal; fue a la universidad, se baño todos los días, comió todos los días, y durmió siete horas porque tenía unas ojeras horribles y no, Jihoon no podía verlo en tan deplorable estado.

Entra en la cafetería quince minutos antes de lo acordado, se sienta en la última mesa y pide un café capuchino.
A las seis y media en punto entra Jihoon por la puerta del local, se acerca a él y se sienta enfrente. Seungcheol puede jurar que nunca sonrió tanto de los años que puede recordar.

-Hola Seungcheol- Jihoon lleva un abrigo negro con una bufanda roja, tiene las mejillas carmín, los ojos brillosos y ya no tiene el cabellos rosa; es castaño claro y esta un poco más corto de lo que el mayor recordaba. Nunca se había visto tan bonito, Seungcheol esta embelesado con su cara, no recordaba lo mucho que le hacía sentir Jihoon a su corazón.

-H-hola- tartamudea tímidamente mientras siente las mejillas calientes

-¿Cómo estas Seungcheol?- la pregunta le molesta un poco porque es obvio que no está bien

-He estado mejor- hace una mueca con los labios- ¿y tú como estas?- se siente un poco desalmado al querer que Jihoon le conteste que no ha estado bien del todo porque ya no están juntos

-Bien me ha ido muy bien- un pinchazo a su corazón pero pone la mejor sonrisa que puede

-Me alegro por ti- la camarera llega con su pedido y toma el de jihoon; un americano con un pastel de fresa, el mayor no sabe porque ha pedido eso, a jihoon nunca le ha gustado el café ni mucho menos la fresa

-Bien ya estoy aquí, dime lo que tengas que decir

-Yo antes que todo quiero pedir perdón por todo, espero que no sea necesario repetir el porque, yo estoy más que arrepentido de lo que hice y dejame decirte que he sufrido mucho, te extraño el departamento no es lo mismo sin ti, mi vida no es nada si no estas conmigo así que por favor mi amor; regresa a casa- le toma la mano y entrelaza sus dedos

-No Seungcheol- el castaño deshace el contado- yo vine aquí a aclarar las cosas, no a regresar contigo- la mesera deja las cosas en la mesa y se va como vino

-¿Ya no me amas?- las lágrimas están por salirse pero debe aguantar

-Claro que si Seungcheol, no puedo dejar de amarte de la noche a la mañana pero ya no quiero, no- se autocorrige - ya no puedo estar contigo

-¿Por qué? Te prometo que no lo volveré a hacer, por favor Jihoon

-No es que no te crea, entiende que ya no será lo mismo, yo no podré olvidar lo que me hiciste. No me malinterpretes decirte adiós me duele mucho, tanto como a ti pero creo que sería más doloroso estar contigo y ya haber perdido el interés en la relación; no quiero luchar por algo que ya no tiene solución, es perder el tiempo, lo único que obtendríamos sería más peleas y más dolor y perdón si es egoista pero ya no quiero sufrir más

-Entiendo Jihoon, pero debes entenderme tu a mi; yo te amo y no puedo sin ti

-No puedo hacer ya nada Seungcheol,  te voy a decir algo y no es para lastimarte; Hoshi me ha pedido una oportunidad y creo que se la daré, esto es para que tu pienses en hacer lo mismo; encontrar a alguien a quien querer

-No jihoon quedate conmigo, no quiero a nadie más

-No es reclamo pero debiste pensarlo antes; ya te he perdonado, no estoy enojado pero ya no quiero estar contigo ni ahora ni nunca

-Si eso es lo quieres lo aceptaré, sé feliz- Seungcheol dejo unos billetes en la mesa y salió de la cafetería con dirección al departamento.
No pudo dejar de llorar todo el camino incluso toda la noche pero debía aceptar las cosas como eran, al fin y al cabo cada quien debe afrontar las consecuencias de sus actos sean buenas o malas.

Debia pagar el daño hecho no había más remedio, Jihoon tenía razón debía salir adelante porque por más que duela, la vida no se va a detener para que tu sufras a gusto, ella avanzará estés listo o no y Seungcheol estaba dispuesto a salir adelante aun con el corazón roto.

Fin.

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Antes que nada y como siempre; Gracias por leer 💕
Le hice una segunda parte porque ustedes así lo quisieron y que les haya gustado me alegra muchísimo, esto es para ustedes, no soy la mejor escribiendo pero me esforcé; tenganme paciencia soy nueva 😳 Ojala les haya gustado aunque sea una poquito y perdón si no los deje juntos pero no me parecía justo después del engaño xd

En fin eso es todo de esta historia.
Comentarios, quejas, sugerencias y correcciones con mucho gusto las leeré 👇