UN ERROR DEL PASADO

                                                       
CAPITULO I

UNA CARTA INESPERADA

Es una noche tranquila y serena como todos los acostumbrados, esa noche Marianela Humboldt celebra su cumpleaños numero treinta y ocho junto a su familia, una mujer espigada y muy elegante. Madre de tres hijos, Elizabeth de diecisiete años , Antonella de doce años y Aaron de diez años. Todos hijos del matrimonio con Mathias Humboldt un abogado reconocido por el profesionalismo de su trabajo. Se han caracterizado por ser una familia tranquila y unida o eso es lo que aparentan.

Pasada la noche la celebración culmina Marianela va a su recamara para recostarse, se quita el vestido negro ceñido al cuerpo que llevaba, es una mujer que a pesar de su edad se mantiene muy bien, con un metro ochenta de estatura y cabellera negra aun roba muchas miradas. Mathias acaba de llevar a los niños a dormir y de igual forma se dirige a la recamara, observa a Marianela y recuerda por que la eligió como su esposa y madre de sus hijos, la tomo entre sus brazos y le promete que siempre estarán juntos tal como lo dijo en los votos matrimoniales hasta que la muerte los separe.

El día amanece con un clima muy lluvioso, pero acogedor y despertar con el aroma del café es una de las delicias de la mañana, Amanda la cocinera preparo unas tortillas con tocino para el desayuno, la comida favorita de Elizabeth la hija mayor, una chica brillante muy buena estudiante que pronto saldrá para la universidad a estudiar psicología, carrera que no es del agrado del padre puesto que su deseo era que su hija estudiara leyes como el, su madre por su parte la apoya en las decisiones que ella tome. La familia se sienta a desayunar excepto Mathias que tuvo que cubrir algunas obligaciones entorno a su trabajo.

Elizabeth con mucho afán busca la correspondencia con la esperanza de que habría llegado alguna carta de la oficina de ingresos universitarios, y así fue entre esas cartas estaba la que tanto ella ha esperado, la chica con mucha emoción la abre y al ver que fue admitida se lleno de una felicidad indescriptible, para su madre fue una alegría que ver que su hija lo había logrado.

Pero esa alegría de la madre duro muy poco, un sobre de color negro muy misterioso estaba con el resto de la correspondencia, no tenia nombre ni procedencia. Ella lo abre con cierta duda, tenia una especie de carta muy extraña, al leerla sintió un escalofrío y el miedo se apodero de ella, el escrito parecía sacado de una película de suspenso. un mensaje corto pero muy contundente que decía :

* LA MAÑANA ESTA ALGO MOJADA Y MI MENTE SIGUE NUBLADA
UN CUMPLEAÑOS AYER CELEBRASTE PERO EN EL DÍA HOY TERMINASTE
A TU FAMILIA QUIERES MUCHO Y ESO NO LO DISCUTO, PERO EL TIEMPO DE MI VENGANZA COMENZARA A CORRER, Y VEREMOS SI A TODOS LOS PODRÁS PROTEGER

Marianela quedo completamente alterada, su mente se lleno de miedos y dudas, ¿Quien habrá enviado esto? y ¿Quien querría hacerles daño?, fue una de las tantas preguntas que se hizo. Algo es seguro y es que tiene que ser alguien cercano que los conozca muy bien, sino como sabría que ayer fue su cumpleaños. Lo único que le quedo fue calmarse y recuperar la calma, nadie debía enterarse de eso y no quería alarmar a sus hijos. Tocaba esperar a que llegara Mathias e informarle sobre lo sucedido.

Cae la noche y Mathias regresa a su casa cansado, después de un arduo día de trabajo. Saluda a su esposa con un beso y se mete a la ducha para relajarse. Al salir de la ducha Marianela muy serena le dice tenemos que hablar sobre una carta que llego hoy con la correspondencia.

Mathias un poco sorprendido le responde:

-Mathias: Una carta? De quien ?

-Marianela: No se de quien es pero llego junto a las otras, me pareció muy extraña ya que no tenia nombre. Toma leela por ti mismo.

Mathias lee la carta cuidadosamente el gesto de su cara cambia rápidamente.

-Mathias: Tenemos que llevar esto a la policía esto es algo muy serio. No podemos quedarnos de brazos cruzados.

-Marianela: Si, es lo que tenemos que hacer, tengo mucho miedo que nos pase algo a nosotros o a nuestros hijos.

- Mathias: Intenta calmarte, mañana vamos con la autoridades y resolveremos esto.

A pesar de que la pareja intentan dormir no lo logran, esa carta le ha quitado su tranquilidad, tan solo pensar que alguien los puede estar asechando y puede hacerles daño a los suyo es algo que a cualquiera se le haría difícil sobrellevar.

Marianela ese día se despierta muy temprano, se prepara un te de manzanilla y evita no despertar a nadie, quería tan solo estar un momento a solas, ella con sus pensamientos y su mente, un momento de tranquilidad. Va hacia la mesa y toma la carta y la lee tantas veces con la esperanza de descifrar algo o encontrar alguna respuesta en esa simple y desgraciada hoja de papel que pueda ayudarla, cosa que logro sin éxito, solo sintió mas impotencia y malestar de como alguien puede dañar la tranquilidad de una persona en cuestión de minutos.