Me toca vivir con mi tía

1 0 0
                                    

Jake P.O.V.

-Mamá, papá ya llegué-grite al entrar a casa, camine a la cocina y los encontré hablando.-¿De qué hablan?-dije dándoles un beso a cada uno en la mejilla.

-Hijo, nuestro viaje se adelantó-no mentiré, si sabía que se iban a ir, pero no quise decirle a Joshua porque estaba seguro me tendría que quedar en casa de Ale.

-¿Cuándo se van?-pregunté temeroso.

-Hoy, por la noche-No!!!!!

-¿Qué?-grite desesperado no los quería lejos eran lo único que tenía.

-Nos necesitan urgentemente en la empresa-Mamá y papá son socios en una empresa de construcción, no son ricos, pero son importantes y ganan bien para ser honesto.-No te quedaras con Joshua por ahora.

-¿Por qué?-pregunté nervioso.

-Iras con Suzanne-dijo mamá, hablando de la cuñada de papá y si la mamá de Alessa.

-No, yo quiero ir con Joshua-dije cruzado de brazos.

-Por ahora no, necesitamos que estés con tu tía, dentro de uno o dos meses iras con Joshua.-suspire cansado.

-De acuerdo-dije mirando a mis pies.

-Has tus maletas que tenemos que llevarte.

Subí las escaleras cansado y llegué a mi habitación para cerrar con fuerza, quería enfrentar a Alessa y recuperarla, pero no ahora, todavía no.

Metí toda mi ropa en 2 maletas y media y la mitad de la ultima la llene de mis utensilios de higiene personal.
En un maletín pequeño metí mis consolas portátiles, la iPad, la laptop y algunos cd's, las bocinas y audífonos. La tía tenía un Ps4 y un X-box one , no necesitaba sacarlo de casa.
En otra maleta pequeña metí mis zapatos y ya estaba listo para irme, tome las llaves de mi deportivo y baje con las maletas pequeñas y dos grandes.

-Listo-les dije a mis papas que estaban en la sala.

Subí por la otra maleta y como si mi cerebro hiciera click lo recordé y saque una mochila del armario donde solo necesite meter unas fotos, un álbum y un cuaderno. Baje corriendo y tome las maletas para meterlas al carro, requerí de 2 vueltas por mis maletas y 4 por las de mis padres, papá se llevo su camioneta y yo mi carro llegue primero a casa de mi tía y baje para esperarlos recargado en mi coche, no pasaron más de 10 minutos para cuando llegaron.

-Lo sentimos hijo, paramos a comprar algunas cosas- papá me ayudo a bajar mis maletas y mamá cargo bolsas de comestibles, tocamos la puerta de la casa y esperamos.

-Hola-dijo Alessa confundida.-pasen-dijo haciéndose a un lado para pasar, dejamos mis cosas junto a la puerta y no nos movimos-Saben esta es su casa, no se apenen-dijo Ale sonriendo-Mamá!!!!-Grito-llegaron los tíos!

-Voy cariño-la tía apareció por la puerta de la cocina y se acerco-hola familia-nos dio un abrazo a cada uno-¿cenaran o ya se tienen que ir?-les preguntó a mis padres.

-Tenemos que irnos-respondió papá triste-pero gracias.

-Es una lástima-Dijo la tía triste.

-Suzanne tenemos que irnos ya, solo venimos a dejar esto-dijo mamá apuntando las maletas y luego las bolsas que cargaba-llevaremos a Jake a el aeropuerto a que nos despidamos y el regresará en un rato.

-¿Bolsas? ¿Por que? -frunció el ceño.

-No queremos dar molestias, solo son frutas verduras carnes todo eso y chuchería.

-Tonteria ningunas molestias-dijo sonriendo

-Lo dejaremos de todos modos-dijo mamá entrando a la cocina y regreso después de unos minutos sin nada.-ya nos vamos, nos vemos en 6 meses gracias por esto, te quiero-dijo mamá abrazándola, cuando se separa se dirigió a Alessa-te amo sobrina y si Jake hace algo no temas en golpearlo-le dijo abrazándola.

-no lo haré-dijo separándose.

-Adiós familia-dijo la tía despidiéndose de nosotros cuando salimos-cariño regresas lo más pronto posible, para cenar-me dijo.

-Si-grite desde la camioneta de mi padre.

Manejo a el aeropuerto en silencio y al llegar yo le ayude con las maletas.

-Adiós hijo-dijo mamá abrazándome y papá se unió a nosotros, unas lágrimas se me escaparon.

-Los extrañare.

-Nosotros también-dijo papá-hijo mira si no estas con Joshua es con una razón, no iras a vivir a casa de Joshua hasta que te digamos por favor. -asentí

-Los amo-dije abrazándolos-no se vayan -susurre mientras lloraba.

-Tenemos que-papá bezo mi cabeza-te amamos, veras que no pasara mucho tiempo.

-Eso espero-dije triste.

Los amaba y no los quería lejos de mi.

-Adiós hijo-susurro mamá que no paraba de llorar-hasta pronto, recuerda...

-Nunca digas adiós-dije sonriendo.

-Porque estás sugiriendo que no nos vamos a volver a ver y eso no es verdad-termino papá .

-Hasta pronto-dije separándome y sonriendo, ellos se despidieron con un beso en mi mejilla y un abrazo y sé fueron.

En el mundo yo detestaba dos lugares.
Los hospitales y los aeropuertos.
No me gustaban los aeropuertos porque cuando era pequeño mis padres viajaban mucho y nunca estaban en casa, siempre estaba yo aquí con ellos o yo viajaba con ellos, creó que los aeropuertos son el lugar donde encontraras el amor en el más puro sentido de la palabra, aquí hay reencuentros qué valen más que lo que esperaste por esto y hay despedidas que te llenan de tristeza.

Camine al estacionamiento y busque la camioneta, me subí y maneje en silencio.

-Llegue-dije al entrar y descubrí que mis maletas ya no estaban en la entrada.

-A cenar-dijo la tía desde la cocina.

Cenamos en silencio, con una que otra platica corta de temas diferentes, terminamos de cenar y Alessa me indico mi cuarto.

-Aquí-dijo enfrente de la puerta, se dio media vuelta, pero la detuve.

-Hablemos.

-Después-se soltó de mi agarre y camino a su habitación.

Memorias de un idiotaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora