capítulo 25

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Mire a los lados y empecé a correr por el largo pasillo, sentía las pisadas de Dante detrás de mí, me detuve al escuchar voces en el otro pasillo

-pero que...-levante una mano callando a Dante y le hice seña para que me siguiera, asome mi cabeza para obtener una mejor visión entonces vi que eran los padres de Solara

Fruncí el ceño al no verla por ningún lado, solo había un chico que se me hacia familiar y... un momento ¿esa es Tamara?

Sin darme cuenta camine hasta ellos, los ojos de todos se dirigieron hacia mí incluyendo una chica que me daba la espalda dándome un genial vista de su trasero, cuando mis ojos hicieron contacto con los suyos, sentí que el aire abandonó mis pulmones. No es real, me estoy torturando, lo hace apropósito, esa no podía ser Solara.

La examiné de arriba abajo sin perderme ningún detalle de ese espléndido traje que le quedaba jodidamente genial, ella enarco una ceja en mi dirección, enserio me la estaba poniendo difícil, luego por un momento recordé que estaba frente a sus padres y que había visto a su hija como si fuese un aperitivo y la vergüenza llegó a mí, tenía que controlarme.

Mire a mis padres y luego a Calum, estaba realmente intentando no golpearlo pero sentía que en cualquier momento mis manos tendrían vida propia y volarían a su cara, sus ojos oscuros me miraban profundamente me escrutaba con la mirada, podía sentir la tensión emanar de su cuerpo, pero luego como si se hubiese dado cuenta de algo apartó la mirada de mi.

-creo que su tiempo se les está agotando, mejor salgan ahora antes de que sea tarde-le habló Calum a mis padres

-¿Qué pasa contigo hijo?, ¿Qué vas a hacer?-pregunto mi mama preocupada, lo cual me sorprendió un poco sabiendo que él no estaba del todo de lado de nosotros.

-no se preocupen por eso, ahora salgan, mientras Dante y yo veremos que no lleguen hasta ustedes-respondió Calum dándose la vuelta con Dante a su lado, y se fueron por uno de los pasillos

Antes de alejarse me dedico una última mirada, pero no pude descifrar que decían sus ojos, solo lo vi alejarse.

-andando-me sobresalte al escuchar la voz de Blake, digo Lehan, oh bueno si, el.

Nadie había dicho nada después de saber su nombre, yo no sabía que pensar, es decir, puede haber muchos lehan en el mundo, nada nos asegura que este sea el verdadero ¿o sí?

Lo seguimos y llegamos de nuevo a la terraza

-Solara, no creo que sea buena idea volver a Rinan, ya saben donde vivimos, necesitamos otro lugar-dijo Tamara, y todos asentimos de acuerdo

-¿Qué tan el mundo de los mortales?-preguntó Lehan

-creo que estaría bien por ahora-hablo mi padre por primera vez

Cuando estuvimos de acuerdo nos tele transportamos hasta allí, Lehan tenía algunos contactos y nos quedamos en un apartamento, nunca habíamos vivido en un apartamento, mi madre les tiene fobia, ¿loco no?

Ya perdí la cuenta de cuántas veces nos hemos trasladado de lugar, pero creo que han sido las veces suficientes como para quedarme sin cosas, esto es frustrante.

Me senté en la pequeña cama que estaba situada justo al lado de la de Tamara, porque debida a la situación teníamos que compartir cuarto, y no era una molestia, solo que no es una costumbre que compartamos cuarto.

-¿lo dejarás ir?-pregunta Tamara entrando a la habitación

-¿a quién?-preguntó frunciendo el ceño

-a Calum-dijo rodando los ojos como si fuese obvio

-¿disculpa?-

-disculpada, pero enserio no creo que seas tan tonta como para no notar que hay gato encerrado aquí-dijo tirandose en su cama

-¿y qué te hace llegar a esa conclusión?-preguntó cruzándose de brazos

-mama me conto que él estuvo todo ese tiempo pendiente de ellos, en realidad el impidió que los maltrataran-murmuró apartando un mechón de su frente

-vale, no sabía eso, me parece muy considerado de su parte, pero exactamente ¿qué tienes que ver eso conmigo?-pregunte aun cerrada hacia su confesión, no quería tener esperanzas de nada que empezara con C y terminará en alum.

-se lo que te dijo, pero no le creo ¿ok? Ahora quiero que vayas lo busques y te asegures de que estoy en lo cierto, estoy segura de que si le exiges respuestas no será tan difícil sacárselas, después de todo eres su debilidad y te ama-dijo como si fuese cualquier cosa, solté una carcajada falsa que ahogaba una punzada de emoción

-¿me ama? Creo que alguien te golpeo bien feo allí-señale su cabeza-me pregunto si todavía quedara algo de conciencia-sentí una almohada estamparse con mi cara, la aparte y entre cerré los ojos en su dirección

-me parece que es todo lo contrario, déjame ser la sabia ahora, y haz lo que tengas que hacer-dijo eso ultimo guiñandome un ojo y saliendo de la habitación, rodé los ojos y arroje la almohada contra la puerta gruñendo, ¿porque sentía que tenía razón? Murmure algo entre dientes e hice una pequeña mochila para ir en busca de respuestas que no estaba muy segura de conseguir ni siquiera sabía cómo iba a llegar hasta él o como lo iba a encontrar.

~el destino

~define destino

~a veces te pones idiota

~mira quien ha venido a hablar

Rodé los ojos y acomode la mochila en mi hombro para luego aparecer de nuevo frente a la famosa guarida de Robert, entre por una de las ventanas traseras, me puse el traje y sobre él me coloque otra ropa, no quería sentirme tan expuesta.

Entre a una especie de habitación solo que en esta había un escritorio, iba caminando a la puerta de salida pero escuche unas voces acercarse y me oculte tras la puerta, esta se abrió dejándome ver una espalda ancha y bastante familiar, Dante se giró a responder algo, pero entonces sus ojos se toparon conmigo, callo un momento y luego continuó hablando.

-Claro David, luego puede enseñarte el truco, ahora tengo varias cosas que hacer, ya sabes, ser el hijo del jefe tiene sus desventajas-dijo riendo forzadamente, el otro sujeto respondió algo que no alcance a escuchar y luego se fue, suspire aliviada, deje mi mochila caer al piso.

-espero y seas sensato, porque justo ahora me estoy conteniendo-murmuré apretando los dientes y sentándome en un sillón que vi situado en un rincón, observe a Dante expectante, el froto sus manos en su cara, en signo de frustración, se me quedo mirando a los ojos un rato hasta que al fin se dio por vencido y jalo una silla para sentarse frente a mi

-bueno Solara, como veras las cosas no están nada fáciles, mi padre aun no sabe que tus padres no están donde deben estar, él piensa que ustedes escaparon, pero sin sus padres, por ahora Calum y yo estamos cubriendo eso, pero dentro de poco, él querrá hacerles una visita a tus padres, y entonces se dará cuenta- se detuvo para evaluar mi rostro y luego prosiguió- nosotros tenemos un pacto con Robert, no queremos que nada malo les suceda a ustedes y para eso tenemos que seguirlo al pie de la letra, todo lo que estamos haciendo es para protegerlos a ustedes, de alguna manera siento que son mi familia, yo siempre desee tener algo así con Robert, pero él siempre estuvo cegado por la envidia, a veces llego a pensar que realmente no amo a mi madre, pero son cosas que he aprendido a dejar a un lado, ahora lo importante son ustedes, y lamento si Calum te lastimo pero, no había otra manera, teníamos que separarnos, teníamos que alejarnos, sino sería muy tarde-dijo lo último en un susurro

-¿muy tarde para qué?-pregunté frustrada, el iba a responder pero entonces la puerta se abrió dándole paso a Calum que al vernos frunció el ceño y miro muy mal a Dante que solo se levanto y palmeo el hombro de Calum.

-espero que hagas lo correcto-fue lo que dijo antes de salir y dejarme junto a Calum.

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Iojfgpoawjtfjwe holissss lamento la tardanza, aquí un capitulo nuevo, espero que les guste <3


A Veces te escucho © |#wattys2016|Where stories live. Discover now