En un segundo.

Un tiempo después de lo sucedido con las «pastillas estimulantes», y que Riko y Momoi fueran perdonadas, la casa de Akashi en Tokio se convirtió en un centro de reunión. Todos iban y venían del lugar como si vivieran alli; algo que estaba sucediendo actualmente.

A pesar de ser San Valentín, muchas parejas se reunieron en aquella casa a pasar el dia. A Akashi no le importaba esto, pero por seguridad, instalo cámaras de seguridad en todas partes, incluso en el baño. También se creó una habitación especial en la cual se podía ver todo lo que las cámaras grababan. Algunos, por mera curiosidad, iban al lugar a «echar un vistazo».

Lo primero que se notaba al entrar en la casa, era el aura de amor y felicidad que desprendían todas las parejas. No había nadie que no estuviera besándose con la persona que amaba, algo que estaba a punto de cambiar.

En la habitación de las cámaras de seguridad, se encontraba Kotaro sentado sobre las piernas de Miyaji, besándose con pasión mientras observaban la pantalla de la computadora que mostraba todos los lugares de la casa.

—¿Y? ¿Qué dices? —pregunto Miyaji, con una sonrisa seductora.

—Que te amo, mucho —contesto Kotaro, sonrojándose al ver la mirada que le daba su novio.

—Yo también te amo, es por eso que... ya sabes, creo que ya es hora de que pasemos al siguiente nivel. —Acaricio el muslo de su pareja, sintiendo como este se estremecía.

—Miyaji, e-esas cosas no se hablan, ¿no? Se...

—Se hacen. —Respondió sin quitar su sonrisa.

—Sí, pero en el lugar y en el momento indicado —al ver que su novio asintió con una sonrisa, acorto la distancia, continuando con su sesión de besos.

Minutos después, se detuvieron al notar que estaban siendo observados por dos chicas que conocían muy bien.

—¿Y ustedes dos que hacen aquí? ¿Nos estan espiando? —les pregunto Kotaro, separándose unos centímetros de su pareja.

—No, estamos paradas aquí hace cinco minutos. Los llamamos y ninguno respondió. ¿Qué querías que hiciéramos? —dijo Riko, siendo apoyada por su novia.

—¿Pueden continuar su «sesión de besos» en otra parte? Ahora nos toca a nosotras estar aquí.

—Bieeen, vámonos a otra parte, Miyaji —tomo a su novio de la mano y salieron de la habitación.

—Claro, a donde quieras... —sonrió.

—Ver a Dai-chan y a Ki-chan tan enamorados realmente me hace muy feliz —dijo mientras observaba a sus mejores amigos por la pantalla.

—Yo siento lo mismo al ver a Kagami-kun y Kuroko-kun, y a Furihata-kun con Akashi-kun... ¡Se ven tan felices!

—¿Y Hyuuga? —pregunto a su novia, con curiosidad. No le molestaba para nada que esta hablara de su ex— ¿Te hace feliz verlo tan enamorado de Reo?

—Bueno, admito que al principio no, pero ahora que estoy contigo... lo entiendo; entiendo cómo se siente... —miro a su novia con una sonrisa, y al instante esta acorto la distancia besándola con pasión.

Pero entre besos, sin darse cuenta, presionaron una tecla en la computadora que más tarde causaría muchos problemas.

Unas horas más tarde, en una de las habitaciones, Kise y Akashi se encontraban hablando con tranquilidad y alegría.

—Me gusta esto, ¿sabes? Que todos seamos tan felices —comento Akashi, mirando a Kise con una sonrisa mientras comía algunos chocolates que su novio preparo para el con mucho amor.