-Sí, sí, estoy bien... ahora que recuerdo, estuve aquí, vine por mi... peine, que tonto, ¿Cómo pude olvidar que estuve aquí?, perdón, no quería hacerte ruido, no quería asustarte -la abrace, para percatarme de que la nota decía eso, la leí una y otra vez, mientras abrazaba a ___, ella suspiro aliviada-
-Está bien, por un momento creí que... alguien más estaba detrás viéndome
-No nena, era solo yo -me separe y tome su rostro para observar la herida que permanecía sobre su frente, mordí mi labio y fruncí el ceño- ___ debes tener más cuidado, pudiste haberte roto la cabeza -tome un algodón, lo remoje de alcohol y limpie cuidadosamente la herida ella gimió de dolor- lo siento -estaba tenso, no podía estar tranquilo, incógnita había estado dentro de mi habitación, dentro de mi baño, vigilándola, mirándola, teniéndola a metros de distancia, había estado con ella en el mismo lugar durante no sé cuánto tiempo, me sentía inseguro, no por mí, por ella, necesitaba mantenerla protegida, pero me era imposible, "A" siempre lograría tenerla cerca, intenté tranquilizar mi rostro, para que ella no notara mi angustia, pero fue en vano-
-¿Te encuentras bien? -Pregunto ella mirándome, mientras colocaba una gasita en su frente-
-Sí, es solo que... -¿le decía o seguía guardándomelo en secreto?- Louis, ya sabes, dejarlo abajo es peligroso, es todo un relajo y... lo de siempre es capaz de quemar la casa sin supervisión, pero es todo
-No creo que "Louis" sea el problema -levanto una ceja y tome un profundo suspiro-
-Me siento culpable de haberte causado ese mal momento -mentí y ella sonrió enternecida-
-Cariño -me abrazo- no hay problema, solo fue un accidente ¿sí? -Beso mi nariz y por unos segundos me olvide de todo, tenerla conmigo me hacía olvidarme de todo y provocaba paz dentro de mí, sonreí-
-Te amo -mire sus ojos, su sonrisa se formuló más específica y detallada, nuestras respiraciones se mesclaban, nuestros labios tenían una distancia razonable, un incline y estarían juntos como el destino lo anhelaba, al igual que yo-
-Sabes... te amo el doble -nuestras miradas decían más de lo que nuestros labios podrían decir, las palabras no pasaban por nuestras gargantas, subían hasta nuestros ojos y lo decíamos todo sin voces, segundos después la distancia se convirtió en un mito, ya no existía entre nosotros. Era un beso dulce, sentirla era lo que más necesitaba en este momento, el sabor de sus labios me hacía desearla más cada segundo que permanecían en contacto, una chispa de nuevo se adueñó de mi interior, las líneas subieron en la gráfica, estaba más que claro, cada vez la amaba más, cada minuto anhelaba más el tenerla a mi lado de por vida, cada milésima de segundo me daba cuenta que me había vuelto independiente de esta chica, sus labios fueron evacuando lentamente de los míos, nuestros ojos parecían estar conectados abriéndose lentamente al mismo tiempo, dos sonrisas salieron a flote de nuestros labios, pose mis manos sobre sus mejillas sin separarme mucho y las acaricie con las yemas pulgares-
-Eres especial -susurre aun mirándola-
-Robaste mi corazón -contesto de la misma forma-
-Solo basto una mirada y sabía que eras la indicada -continuamos una pequeña platica romántica/cursi entre susurros-
-Solo basto un suspiro, un rose y me tenías atrapada
-No necesitaste tocarme para hechizarme, tu presencia lo hizo
-¿Crees en el amor? -ella sabía mi respuesta, pero quería que se lo hiciera saber a pesar de que siempre lo hacía-
-Claro que creo en ti -sonreímos- no necesito ser un anciano de cien años para darme cuenta que eres el amor de mi vida
-Todos dicen que somos muy jóvenes, hacen apuestas sobre nuestro amor, ellos...
-Ellos no saben sobre lo nuestro, están celosos, ellos... ellos... no te conocen, no saben lo que sentimos el uno por el otro -acomode un mechón de cabello que yacía sobre su rostro, colocándolo detrás de su oreja- está de más decir lo que ya sabes, sin embargo lo hare... Te amo
-No está de más, amo que lo hagas -sonreí- también te amo Haroldo -reímos levemente-
-Harolda -reímos más- así te diré, eres mía
-el señorito Haroldo resulto ser muy posesivo
-la jovencita Harolda resulto comprender rápido
-Lamento interrumpir -escuchamos decir una voz femenina que llamo nuestra atención-
-No, está bien -dijo ____, mirando en dirección a la puerta del baño donde se encontraba la misma chica con la que charlaba Zayn minutos antes de que subiera-
-Ary está buscándote abajo -le dijo a ___-
-¿A mí? -Pregunto mi novia, la chica asintió, ___ se levantó de la taza donde estaba sentada y camino a la salida-
-Te amo -mencione antes de que pudiera irse, ella me sonrió y lanzo un beso, para después desaparecer por la distancia-
-Son muy tiernos -me percate de la presencia de aquella chica, la mire-
-Es lo que el amor provoca -le hice saber-
-Me llamo Laure -me sonrió, yo me levante del suelo-
-Harry -estreche su mano-
-Styles -corrigió-
-Si... ¿Cómo sabes? -Fruncí el ceño-
-Te he visto en carteles -dijo confusa-
-Oh, cierto, lo siento -aun andaba algo paranoico-
-Escuche que eras distraído, no creí que tanto -rio-
-Sí, estoy un poco distraído hoy -camine a la puerta pasando a su lado, sentí un pequeño roce con sus manos tocando mi brazo, la mire de inmediato, ella me sonrió, ignore la incómoda escena y Salí de allí lo antes posible, al llegar a las escaleras, recordé la nota, regrese nuevamente a mi habitación, Laure venia de salida, entre y la nota no estaba- Laure -mencione antes de que bajara- ¿no viste una nota en el baño? -Ella negó con la cabeza-
-No, ¿por qué? -pregunto-
-¿Segura?, era un papel importante
-¿Revisaste en el cesto de basura?
-¡Verdad!, Gracias -volví a entrar, le eche una mirada al bote de la basura, nada, me asome detrás del retrete, BINGO!, la tome y la doble, la metí dentro de la caja junto con las demás notas, escondí la caja nuevamente y baje, notaba el ambiente tenso, quizá solo era yo y mis paranoicos pensamientos de que alguien podría estar dentro de mi casa donde se encontraban mis amigos, intento asesinar a mi novia y sé que sería capaz de hacer cualquier cosa para matarnos a todos, incluso sería capaz de sellar todas las entradas y salidas, incendiar el lugar y matarnos y lenta y dolorosamente, si, quizá por eso, me senté en el sofá junto a Louis, estuvimos charlando mientras le echaba un ojo a ____ quien se encontraba en el otro sofá charlando con Gemma, no quería perderla ni un segundo de vista, pero tampoco podría comportarme muy sobreprotector, eso lo arruinaría todo, ella notaria que algo me sucede y si le decía la verdad esto se pondría muy feo, giro su vista a mí y me sonrió mientras Gemma le enumeraba un par de cosas con los dedos de la mano, le devolví la sonrisa y le guiñe un ojo, mi celular vibro en mi pantalón, lo saque rápidamente para frenar la vibración, era un mensaje de texto, desbloquee la pantalla, abrí el mensaje sin ver el número "Son verdaderamente un juego de amor, ¿te cuento un secreto? Me encantan los juegos, pero solo los que no tienen un final feliz. Espero sea buena con el sexo, porque tiene un cuerpo increíble, debo admitirlo, también tiene una hermosa sonrisa, y ¿no quisiéramos que esta desapareciera muy pronto cierto? Cuida tus movimientos, porque sería una lástima ver como este fresco y jugoso cuerpo se pone pálido y frio, A", nuevamente esa sensación paso por mi interior, la sangre dejo de correr por mis venas, dos archivos adjuntos venían incluidos, los descargue rápidamente, deseando que no fueran lo que creía, la descarga fue completada, los abrí rápidamente, no, mis suplicas no eran útiles, dos imágenes de mi chica en la ducha de espaldas, desnuda, definitivamente había estado observándola, definitivamente no sabía que era más lo que sentía si coraje, frustración, miedo o furia, quizá una sensación de todas combinadas, mire rápidamente al frente, ella estaba allí, su mirada revelaba confusión ante mi reacción, vi una sombra pasar detrás de ella, abrí los ojos, me levante rápidamente y me acerque a ella, la tome del brazo y la abrace con fuerza, esta no debía ser mi reacción, quizá debía ir a revisar toda la casa y evacuar a todos, pero con trabajo lograba respirar y tragar saliva, necesitaba el calor de su cuerpo para tranquilizarme y luego poder actuar, intento decir algo, pero solo la apreté con mas fuerza, lentamente fue correspondiendo a mi acción y me rodeo con sus brazos acariciando mi espalda-
-¿Qué pasa Harry? -pregunto sin lograr que la soltara-
-Necesito que te quedes en casa conmigo -susurre, tenía un plan, y esperaba funcionara, porque de lo contrario sus amenazas se harían algo real y posiblemente todo esto se iría a la mierda-