Si alguien le hubiera dicho que alguien le haría temblar de pavor y respeto se hubiese tomado ese comentario a broma, decir que se sentía como un pequeña presa atrapada en las garras de un depredador cruel que no le daba muerte digna si no que se atrevía a jugar con él era poco y aun así, por hilarante que parezca le daba curiosidad y atraía de manera masoquista, si no fuese así, que otra razón habría de existir para estar sentado frente aquel que miraba sin ver?
-Gusta tomar algo?
-No muchas gracias
-Le intriga no es así?
-el que?
-Saber que tiene el querido Rido entre manos, no, más bien tiene una morbosa curiosidad por saber el desenlace de toda esta historia que entretejen ambos Kuran
-Es usted un hombre muy observador Zev
Rio brevemente mientras le veo acomodarse en su asiento en una pose que me daba a entender que él de fiel siervo no tenía nada.
.-Pero aun así no entiendo porque lo hace usted
-Ho! Créame yo no poseo mórbidas curiosidades
-lo se, por ello es que me pregunto...que le incita a estar aquí como los ojos de Rido
-me mueven otras índoles personales
-no lo comprendo
-nadie lo hace
Le veo sonreír mientras se levanta de su asiento y se coloca frente a mí.
Me veo forzado a elevar mi rostro para poder observarle con detenimiento
-que daría?
Le veo de manera confundida a sus palabras
-perdone?
-Que daría por comprender?
Le veo con detenimiento sintiendo un poco de escalofríos por sus palabras
-Es usted un demonio?
Escucho una carcajada de su parte mientras se inclina hasta quedar en cuclillas frente a mí
-parece ser que usted se ha confundido joven Takuma
-perdone?
-no, no soy un demonio
-pero su hermana...
-ella si lo es, no lo niego, pero yo no lo soy
Le miro fascinado ante la nueva intriga que se presenta ante mí
-cuando todo esto acabe joven Takuma su joven Kuran se arrepentirá de muchas cosas así como mi querido Rido, pero a diferencia de su joven Kuran el querido Rido ya tiene saldadas sus deudas
-cómo?
Le veo sonreír y no logro decir más al ver como aquellos ojos sin vida cambian a unos que pueden ver, que viven y ven más haya de mí, unos ojos azul tormenta, una tormenta mortal.
-Usted ama a su joven Kuran
Siento mis mejillas arder al comentario y trato de ponerme de pie sintiendo como aquel de ojos azul fiero me detiene
-no se moleste ni se sienta avergonzado joven Takuma, su secreto está a salvo conmigo.
-está usted equivocado en sus especulaciones!
-no son especulaciones... por favor no se altere joven Takuma, el que yo lo sepa no significa que sea dominio del querido Rido
-miente!
-yo no miento Takuma!
Esta vez es él el que ha alzado la voz y no puedo evitar temblar un poco ante ello, suspiro y me trato de calmar, lo mío nunca ha sido perder la compostura de tal manera.
-cómo puedo confiar que asi sea?
-créame, esa información no es de relevancia para el querido Rido, no siempre los que somos ojos lo somos solo para quien servimos
-cómo?....esta usted diciendo que traicionaría a Rido de ser posible?
-yo no trabajo para Rido, soy hombre movido por intereses propios
-y que gana ayudando a Rido?
-eso no es el tema en cuestión o sí?... más bien que piensa hacer usted cuando su querido Kuran pierda? Que tanto estaría dispuesto a pagar por ayudarlo?
-cómo puede estar tan seguro de lo que dice?
-su joven Kuran ha encontrado una fuerza poderosa he inamovible y es por manos de esa fuerza que se interpone ante él, yo veo todo joven Takuma, lo sé todo y soy yo quien en realidad salva o condena a quien no sabe tratar conmigo
-le hará usted algo a Kaname?
Le escucho reír levemente mientras se incorpora
-no Takuma... no soy yo esa fuerza de la que le hablo
-entonces?
-le daré un consejo joven Takuma, haga que su joven Kuran colabore con Rido porque si el tal Kaname no recapacita usted será el único que llore su perdida.
-miente!!
-que está dispuesto a dar joven Takuma?...
Le veo erguirse totalmente y ver como sus ojos vuelven a perder la vida en ellos mientras se aleja de mí
-que es usted? Que quiere de todo esto? Que gana?
-Tengo muchas cosas que hacer aquí joven Takuma, muchas cosas que corregir, personas a las que hacer feliz y un deseo, como puede ver lo mío no es simplemente una mórbida curiosidad.
Le veo alejarse completamente dejándome solo en aquel salón... ¿Qué era el joven Zev?.....

ESTÁS LEYENDO
Z
FanfictionEl torrente que pasa a mi boca diluyéndose en mi, dejando solo la sensación de una unión ya inevitable; ya no hay quien pueda negar que me pertenece por siempre.