OJOS SOÑADORES

CAPITULO 1

Me deje caer sobre la cama, mirando hacia el techo de mi habitación, pero no veía nada, aun no lograba asimilar la noticia que la directora de teatro me acababa de dar, como era posible, si solamente a mí me pasan estas cosas.

-lou- escuche la voz de mi madre –puedo pasar?

-adelante 

   jay se sentó junto a mí, no necesitaba ser una adivina para saber que algo me paso.

-qué ocurre?

-nada, solo... solo la directora decidió cambiar a los chicos de la obra.

-no te agradan?

-no, ellos no quieren estar ahí, es un castigo y ahora yo debo soportarlo también.

-deberías darles una oportunidad, quizás aprendan amar el teatro.

-lo dudo mamá, ellos son los típicos chicos egocéntricos, con demasiada popularidad, amantes del deporte, solo... solo van a arruinar las cosas.

-no estas juzgándolos un poco rápido?

-no lo sé, solo... solo no quiero que arruinen algo que me gusta tanto.

"y que terminen lastimando mi corazón" pensé, porque eso no era todo lo que me molestaba y asustaba.

-tal vez sea una oportunidad que tengas para enseñarles a ellos, solo piénsalo cariño, da tu mejor esfuerzo.

-aja, lo intentare.- dije sin ganas

-en media hora estará la cena.- me aviso mi madre y salió

Di la vuelta quedando boca abajo, como iba hacer ahora, siempre he sido el típico chico invisible, y no es que me moleste serlo, simplemente no me gusta llamar la atención, me gusta pasar desapercibido, pero claro, algún día esa paz se acabaría, pero que manera de hacerlo, porque tenía que estar justamente él en el grupo de chicos, oh si, de que mi vida va estar como en una montaña rusa de eso estoy seguro.

-solo espero no volverme loco en el intento.- susurro para mí mismo.

Bajo hasta el comedor, mis hermanas ya están en la mesa y mi madre les servía, la cena fue tranquila, quizás las gemelas estaban cansadas y por eso no molestaron, volvía mi cuarto dispuesto hacer mis tareas, una hora después mi celular comenzó a vibrar, era un mensaje, cuando miro quien era, oh si, supe que mi tormento recién empezaba.

La pequé

"yah, tu pequeño travieso, como es posible que no me hallas dicho nada, enserio, a mí, tu mejor amiga... huy... en fin