Mis Aviones De Papel

Primer Avión: Un pájaro

Los pájaros volaban sobre el atardecer. Revoloteaban y planeaban; subían y bajaban. Yendo de un árbol a otro, sobrevolando los edificios. Sus voces se unían unas a otras, gritando "LIBERTAD", mientras las columnas grises intentaban encerrarlos con sus tejados. La Luna empezaba a salir para cuidarles en la oscuridad, ellos seguían bailando puramente con alegría y un toque de rebeldía.

Me pregunto el porqué de no haber nacido pájaro; volar mientras la noche en bullía la ciudad, mientras yo brillo con luz propia. Creando música al nadar por el cielo. Sentir el aire en las alas mientras bajo en picado. No preocuparme por nada salvo por intentar no caer sobre el cielo, sobre la realidad.

¿Los pájaros tienen preocupaciones? Si yo tuviese preocupaciones volaría alto, muy alto. Y luego pararía y empezaría a caer, haciendo que el viento no me dejase pensar. Y, al llegar al suelo, me posaría y respiraría hondo.

Por la noche contemplaría las estrellas, subiría tan alto como para que las luces de la ciudad no me pudiesen atrapar. Y volaría como si estuviese viajando con ellas.

Cuando tuviese que comer, comería. Cuando tuviese que dormir, dormiría. Y, cuando tuviese que hacer mis necesidades, me acercaría al centro de la ciudad y dispararía a la diana que algunos tienen en el centro de su pelo.

Eso sería libertad. Parece que la tenemos, pero yo no estoy tan seguro.

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Terminé de leerlo, y empecé a doblar el papel. Lo lancé por la ventana y desapareció. Los vientos lo llevarán de un lugar a otro, haciendo que la gente me escuche.
Es mi forma de comunicarme, por aviones de papel.
Mis aviones de papel.