Capítulo 1 - Las leyendas del pueblo

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En el pueblo desde que era niño se escuchaban leyendas de vampiros, brujas y hombres lobo incluso las madres advertían a sus hijos que de no obedecer la bruja se los llevaría y comería como hacia con todos los niños que desobedecían deliberadamente a sus padres.

Lo que me llevo a la pregunta de que en este mundo éramos solamente criaturas pasajeras que podrían tener un destino fatal ya sea devorado por una bruja, mordido por un vampiro , cercenado por las afiladas garras de un licántropo o bajo el plomo en tu cuerpo dado por las balas de tu oponente en una guerra

De todas esas opciones la idea de las balas me sonó tentadora y demasiado excitante poder perecer con gloria en tus venas y de cierta manera poder identificarte con poder ser un héroe de guerra al que mencionarían en una especie de homenaje cuando nuestros huesos se hayan ido las leyendas seguirán tan frescas como el césped en las mañanas

Así que a los 16 cuando termine la escuela decidí enlistarme en el ejercito era una forma sutil de huir de casa , amaba a mis padres pero la situación precaria me llevaba a ser una carga ni siquiera podía aspirar a una universidad ya que no teníamos dinero para pagar una por ende la idea del ejercito fue la que más me gusto

No lo voy a negar estaba asustado de sobre manera tenia el miedo clavado de no poder ser alguien fuerte ya que no tenía una contextura precisamente robusta pero todo se lograría con entrenamiento y perseverancia así que no puse objeciones a la idea de quedarme aun cuando era enclenque y los compañeros se reían de mi por no poder completar aquellos estúpidos ejercicios.

El primer año fue duro pero cuando entran mas novatos la atención de los bravucones se va con ellos lo cual me dejaba tiempo libre no solamente para entrenar más tiempo sino que para entablar una amistad con alguien y dejar de hacer las tareas que se supone ellos deberían hacer

Así pase casi 7 años en el cuartel me dieron algunos cargos y honores por ayudar a las personas cuando habían protestas por cualquier motivo también nos mandaban a cuidar la frontera de el país algo que detestaba porque tenias que matar como perros que intentan entrar a tu casa odiaba esas comparaciones pero era parte de mi trabajo no podía fallar o temblar mi pulso

Una noche después de patrullar la ciudad decidimos ir a un bar bastante concurrido en mi pueblo no quería ir a casa tan tarde y despertarlos estaba seguro que mama querría preparar algo y papa no dejaría de hacerme preguntas sonaba tierno pero era de madrugada iría temprano con café y algunos pastelillos para contarles

Recibíamos una atención preferencial por los uniformes la gente nos llamaba a menudo héroes o defensores lo cual alimentaba mi ego de cierta manera.

El bar tenia música del momento sonando me sentía feliz en aquel bar tomando cerveza rustica que quemaba mi paladar las bromas estúpidas y ver mujeres bailando tan ebrias me causaba cierta gracia

Pero entonces la vi, aquella castaña que estaba sentada en una mesa alejada que casi no tenia luz vestía un vestido de color rojo oscuro tenía unos labios hermosos y ojos color claro simplemente me pareció la mujer más hermosa que jamás vi

Mis compañeros al notar aquella escena tan boba de mi persona admirando la belleza de la castaña como si se tratara de un ángel comenzaron a burlarse, reían y decían que dudaban que fuese heterosexual ya que antes jamás me intereso una mujer así

Pero no era mi sexualidad era mi timidez desde niño siempre tenía esa timidez de hablar con alguna mujer me causaba inseguridad hacerlo

Les dije que se callaran y que no hicieran un espectáculo además estaban ebrios ya no debía tomar enserio las tonterías que decían

La castaña no estaba sola un hombre de cabello negro estaba a su lado me miraba de mala manera sintiendo la incomodidad que le causaban las miradas entre la castaña y yo decidí pararlo y girar mi rostro no sabía si era su novia pero si era así lo único que iba a ganar era una paliza

Me levante de la mesa pero estaba mareado tenía demasiado alcohol en mi cuerpo pero ni siquiera note en qué momento pase de "No bebo mucho" a pagar la cuenta.

Aunque mis compañeros insistieron que me quedara mi respuesta siempre fue que no pero no sentía ya ánimos de quedarme la castaña desaparecen con aquel pelinegro así que no tenía motivos para quedarme.

Con ayuda de un mozo Salí del bar tambaleándome pero intentaba no caerme

Al salir escuche como unos hombres comenzaron a insultarme llamándome asesino ni siquiera podía distinguir sus rostros pero dos de ellos me tomaron de los brazos y otro empezó a golpearme repetidamente en el vientre me queje de dolor y en un momento comencé a forcejear pero era inútil ellos eran tres y no estaban ebrios

Empecé a escupir sangre hasta que el que me golpeaba cayó al suelo , los que me sostenían de los brazos me soltaron y salieron corriendo caí al suelo lleve una mano a mi abdomen divise al hombre en el suelo tenía un hoyo en el pecho como si le hubieran arrancado el corazón unos tacones se acercaron a mi era la mujer castaña de vestido rojo ella se acerco a mi analizo mi rostro acto seguido mordió su muñeca y me dio de beber su sangre al inicio puse resistencia pensé que estaba loca pero insistió

Al beberla sentí casi un alivio instantáneo en todo mi abdomen podía jurar que tenia las costillas destrozadas pero ahora ya no mas

Me levante con cuidado mirándola fijamente

—No tengas miedo, soy Lara no voy a hacerte daño... lo prometo

La mano de la castaña estaba cubierta de sangre y ahora veía con claridad que el corazón del sujeto estaba a un lado tirado

—Gracias, por salvarme de no haber llegado estoy casi seguro que ahora estaría muerto, mi nombre es Adam.

—No te preocupes... ¿Tienes a donde ir?

Entonces pensé que en definitiva no tenía a donde ir no podía llegar a casa como estaba pero lo más importante tenía que salir de allí lo mas pronto posible

—No, no tengo a donde ir.

Ella extendió su mano con una sonrisa parecía muy tranquila para haber matado a alguien incluso yo ignoraba que mato a alguien y que su sangre me curo.

— ¿Qué eres?

—Una vampiresa, las leyendas en este pueblo son ciertas Adam creo que una parte de ti lo sabe por eso huiste al ejercito

Me quede callado, ¿Cómo sabia eso? Era la primera vez que nos veíamos pero parecía segura de mi pasado.

— ¿Cómo se que no vas a matarme?

—Si lo quisiera hacer, ya lo estarías.

Tomo mi mano y me llevo hasta su auto que era conducido por aquel pelinegro con el que estuvo en el bar.

En el camino no podía articular palabra no sabía de qué hablar con ella precisamente o que decirle solamente sabía que era hermosa y que tenía un estúpido sueño que hacía que mis parpados 'pesaran simplemente cerré los ojos para descansar y escuche al pelinegro empezar a hablar.

—Estás loca, ¿Qué crees que va a pasar ahora? Es como si recogieras un perro de la calle

—Cállate Charles, ¿no entiendes? Casi lo matan no podía dejar que eso pase tan solo piénsalo una muerte a mi larga lista

—Solo digo que se quede esta noche y en la mañana se ira

La castaña no respondió nada y comenzó a acariciar mi mejilla delicadamente luego mi cabello como si de un niño pequeño se tratara.


EDITADO ♥ 

Gracias por leer....

Estoy trabajando en un nuevo proyecto con actualizaciones interdiarias lo pueden encontrar en mi perfil "Blood and Love"

Esta obra estará siendo editada asi que no se pierdan las actualizaciones. 


Eternamente enamorado de ti || COMPLETA||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora