Vinimos en barco, tú y yo.
Yo era una bebé en el regazo de mi madre. Tú era el niño ceceante de pelo rizado que se pasó la travesía jugando a los pies de la suya.
Mientras nos cuidaban, nuestras madres llegaron a apreciarse. Tanto, que nuestros padres eligieron terrenos continuos a una milla del pueblo, en el lado oeste de un Roswell Station mucho más pequeño de lo que es ahora.
Recuerdo las historias de la travesía que mi madre contaba cuando yo era pequeña. Ahora ya nunca habla de ello.
Decía que me pasé el viaje entero con los ojos como platos, mirándote.
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Toda La Verdad Que Hay En Mí
Teen FictionAntes que nada quiero decir que este libro tiene derecho de autor, yo no lo escribí; me gustó demasiado así que quiero compartirlo ya que no está por aquí. Una desaparición. Un regreso humillante. Una muchacha obligada a vivir en silencio. Un secret...