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Odiaba tanto haber entrado a esa escuela y odiaba un poco más el hecho de que fuera tan temprano.

Jeonghan se removió de las sábanas, se sentó en la cama sintiendo una horrenda punzada en la cabeza. La noche anterior había bebido demasíado, eso lo recuerda perfectamente. Se levantó desganado de la cama y fue a ducharse.

Hoy era el inicio de un nuevo semestre y vaya forma de iniciarlo. Se puso algo conveniente, unos pantalones negros ajustados, un suéter rosa holgado y unos tenis blancos.
Desayunó y tomo su patineta para bajar las escaleras.

En ese momento odiaba tanto vivir en el último piso de aquel lujoso condominio del cual sus padres eran dueños.

Su familia era lo último que quería ver.

Su madre era una mujer interesada y algo fácil con los hombres. Era co-dueña de una firma de abogados junto al padre de Jeonghan, el cuál era igual que su madre.

Él era mujeriego y ambicioso, pensaba sólo en el dinero y en hacerlo crecer. Era accionista en varias empresas y poseía cadenas de hoteles... ¡ah! Y una sexy modelo como amante.

El tener esa clase de ambiente familiar era totalmente bueno y malo a la vez. Malo porque faltaba amor y apoyo. Bueno porque tenía exuberantes cantidades de dinero y podía hacer lo que quisiera cuando se le deseará. Pero no abusaba de ello pues había algo de conciencia en él.

Jeonghan llego 20 minutos antes de la clase inicial y se encontró a su mejor amiga. Mildreth, esa amiga que siempre había estado con el desde los 8 años con un entorno familiar amoroso y cálido que ayudaba a Jeonghan en cualquier momento. Mildreth era una chica de la unión de su madre mexicana y su padre coreano, al principio vivían en México y después se habían mudado a Corea para mejores oportunidades. Era una persona amable y ruda. Era una mezcla de chica sofisticada y un chico estupido amante del skateboard.

—¡Bastardo! —sonrió la pelinegra mirando a Jeonghan con una enorme sonrisa.

—Zorra —Jeonghan le devolvió el saludo y le dio un beso en la mejilla.

—¿Qué tal tus vacaciones de verano? O mejor dicho, ¿cómo esta tu trasero después de esas noches? —la chica miraba con una sonrisa pícara al mayor.

—No pasó nada relevante. Nada de nada por dos meses —estalló en risas Jeonghan.

—Eso me alegra, pero escucha, ayer mi madre me platicó que entraría nuevo directivo y Magisterio así que tendremos nuevos profesores —las palabras salían de la boca de la chica con un tono preciso e informativo, casi como un reporte policial.

—¿Crees que puedas con ellos?

—No hay imposibles para Yoon Jeong Han —habló con arrogancia el pelinegro de cabello a los hombros.

—Por cierto, esas extenciones que usaste en las fotos del sábado lucían increíbles —dijo guiñando el ojo.

—Idiota —rió el mayor sacando la lengua.

—En mi país se les dice más dulce a las personas como tú y como yo —la pelinegra se inclinó para mirar a Jeonghan—. Para idiota se le dice pendeja y para Jeonghan se le dice puta.

Aunque su lenguaje y forma de expresarse el uno por el otro era grosera ambos se llevaban excelente y siempre se apoyaban.

—Chicas,no comiencen con sus tonterías sin mi —dijo el castaño de grandes mejillas llamado SeungKwan mientras se acercaba a ellos con un puchero.

—¡Te extrañéeeeee! —Mildreth abrazo fuerte al mencionado y lo lleno de besos por toda la cara.

—Estúpida,mi homosexualidad idiota.

Entre esas y muchas más tonterías avanzaron las pláticas y los maestros dándoles la bienvenida, pero Jeonghan nunca prestaba la atención hasta que llegó el indicado.

—Hola a todos —sonrió el amable chico de cabello castaño con un traje ajustado que hacía ver su figura y los marcados brazos.

Jeonghan estaba completamente embobado.

—Pueden sentarse —el chico les dio la espalda y comenzando a escribir en el pizarrón.

Jeonghan miro de arriba a bajo analizando al castaño mordiendo su labio inferior, debía admitir que tenia un muy buen trasero.

—Ojalá Vernonie tuviera un trasero igual a ese —susurró SeungKwan mordiendo su labio.

—Amigo, tú como buen pasivo tienes el mejor culo, a Vernon no le hace falta —dijo Mildreth regalandole una agradable sonrisa.

—Se apartan que este va a caer conmigo —añadió el pelinegro guiñandoles el ojo.

—Muy bien, chicos. Mi nombre es Hong Ji Soo, tengo veintiséis años y vengo de Los Ángeles, California en Estados Unidos —dejó a la vista sus blancos y hermoso dientes, se sentó en la esquina del escritorio y acomodó su pantalón el cuál dejó ver un bulto de considerable tamaño llamando la atención de Hannie.

Una chica de cabello rubio y apariencia 'sexy' levantó la mano.

—¿Soltero, casado o con hijos? —preguntó Cassy, la enemiga número uno de Jeonghan, la típica rubia hija de puta que usaba ropa muy reveladora.

—Ninguno de los anteriores —JiSoo sonrió algo penoso y miró a la pelinegra quien ahora levantaba la mano—. ¿Sí?

—¿Cuál es su preferencia sexual? —sonrió y miró a Jeonghan quien se enorgullecía de su amiga.

JiSoo se puso nervioso y se sonrojó.

—Soy gay —admitió.

Se pudo ver la cara de decepción de las chicas y más de la zorra rubia.

La clase continuo y JiSoo hablaba de como se había interesado en esa rama de la maestría. Era el primer profesor al cuál Jeonghan prestaba atención.

El timbre sonó anunciando el almuerzo.

—¿Ya estas listo Hannie? —preguntó la azabache abrazando al más alto por la cintura.

—Aún no, a buena hora se me ocurrió querer pedirle un libro a Wonwoo y se acaba de ir —hizo un puchero—. Adelántense y pidan mi almuerzo, luego los alcanzó.

Los chicos hicieron caso y se despidieron de el para ir a la cafetería.

—¿Por qué no va a su hora de almuerzo? —preguntó JiSoo borrando la pizarra.

Oh Santa mierda...

—Yo... bueno, es que... —¿por qué en este momento le faltaban las palabras?

—Nada, sal a disfrutar —sonrió y le guiñó el ojo.

"OKAY, no hay que entrar en pánico Hannie".

—Profesor, no me puede tratar como un niño, ya soy casi un adulto —dijo indignado el pelinegro.

—¡Vaya! Entonces puede quedarse aquí —sonrió y tomó su maletín para después acercarse a Jeonghan—. ¿Cuál es tu nombre? —dijo a centímetros de su cara.

—Yoon Jeong Han —el menor se sonrojó y miró los labios del mayor.

—Nos vemos, Hannie —sonrió y se fue.


"Definitivamente tiene que ser mío".

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Hola,bueno este proyecto será intercalado con mi otra novela asi que un dia subo esta y al dia siguiente I Still Lobe You.

Espero que está historia tenga el mismo recibimiento que ISLY.

Espero sus votos y comentarios

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