Capítulo 5

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Ok... tuvimos que volver a subirlo pero aquí esta! Yey

 amor y paz hermanos ✌

Ok...Sam esta parado con una escalera junto a la ventana ¿ahora que demonios hago?¿lo dejo pasar? ¿lo ignoro y vuelvo a dormir como si nada?. Creo que lo dejaré entrar, hace mucho frío afuera y bueno no puedo negar que seria una muy buena compañía... nooo que estoy diciendo, no con el no, es egocéntrico, mujeriego y probablemente este metido en algunos líos, pero que más da se esta congelando.

-Sam, ¿Qué haces aquí?- susurre para no despertar a mi padre

-Acaso ¿no me quieres ver?

-¡Pero si casi ni te conozco!

-Bueno, es un buen momento para conocernos- me miro con cara pervertida

-Como sea, debes irte

-¿Me dejaras aquí solo y con frio?- puso cara de perrito triste

-Emm... si- cerré la ventana. Quizás así se iba.

Sentí que tocaron la puerta, corrí a abrir para que no fuera mi papá y viera a Sam afuera, no quiero que me interrogue por esto. Abrí y ahí estaba él temblando por el frio.

-Al fin abres, me iba a congelar- y entro como si nada.

-No te he dicho que entres- puse mis manos en mi cadera.

-De todos modos me dejarías hacerlo- no dije nada, se acerca un poco más a mí –hace frío ¿me darías un abrazo?- dice haciendo un puchero.

-Lamento decirte que no eres adorable- miento, si lo es .

-Como digas- y me abrazó. Estaba muy helado, me apretó más.

-Me estas aplastando- dije como pude.

-No te quiero soltar, estas calentita- dijo cerca de mi oído.

-Deberías irte, es tarde- miré hacia afuera y estaba súper oscuro todo- mi padre te puede ver y no quiero problemas.

-Tranquila, él no está- dijo súper seguro.

-¿Cómo sabes eso?- me siento confundida, aunque de todos modos no lo sentí llegar en ningún momento.

-Pero si nunca llegó por dios vives con él y ni sabes si llego o no.

-Primero que te importa, segundo me intimidas y tercero ni siquiera sé qué haces aquí - dije enumerando con mis dedos y alejándome de el ya que aún no me soltaba.

-Bueno estaba solo en casa, mandando textos a una chica por cierto un poco mandona y pesada-

-¿Ah, sí?-

-Sí, y pase a verla para alegrarle la noche, ¿no te quieres divertir?-comenzó a acercarse.

-¿Qué demonios te sucede?-dije empujándolo lejos de mí-¿Con quién crees que hablas? no soy de esas - dije irritada. Comenzó a reírse, ¿qué?- ¿qué te parece tan gracioso?-

-Como te ves enojada - dijo limpiándose una lágrima.- ¿y tú crees que lo decía enserio? ¿Tan bien actúo?--Sentí como se me oprimía el pecho, eso dolió más de lo que esperaba. No dije nada - hey, fue una broma, que aburrida eres.- dijo riendo

-Ya es muy tarde, no quiero problemas

-¿Enserio estas enojada?- preguntó sonriéndome.

-No, sólo estoy un poco dolida por tu broma- pensé- no estoy enojada.

¿Qué está pasando?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora