Capítulo Único

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Erase una vez un cuento Alternative Universe en el que participaban personajes de IEGo! Galaxy...

Un día muy especial. Un día que a ciertas personas les hizo pensar «por fin llegó el día». Sobre todo era un día muy importante para la protagonista de esta historia. Porque, a ver, era la protagonista. La cosa es que hoy sería el día en el que Cherise Blossom se casaría con su gran amor. Sí, Cherise Blossom, la gimnasta pelirrosa centrocampista del Earth Eleven. Y se casaría ni más ni menos que con uno de los chicos de su equipo. Que tal vez en la serie esos personajes no interactúen mucho entre ellos, pero la escritora encontró unos fanarts tan bonitos de ambos que decidió casarlos. Aquel chico afortunado tenía ojos violetas que se asemejaban a los de un gato. Un chico apuesto y bastante alto que le robó el corazón a Cherise desde la primera vez que lo vio en este Alternative Universe: Terry Archibald.

—¿Estás nerviosa, Cherise? —le preguntó Skie, una de las amigas de la gimnasta, que la estaban ayudando a vestirse y que en estos momentos estaba peinándola.

—No —respondió la pelirrosa, dejándose peinar—. No... es decir, sí. Pero no. A ver, que nervios tengo. Pero yo... Que no. Bueno, sí.

—Cherise, decídete —le dijo la peliazul riéndose.

—¡Ay, yo que sé! ¡No! ¡No estoy nerviosa! —gritó de repente la futura novia.

Skie siguió sonriendo.
Entonces en la habitación entró otra chica, muy bajita y con el pelo rizado y verde que llevaba un gran bote de helado que casi era del mismo tamaño que ella.

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—Chicas, he traído helado de chocolate —anunció Trina.
La defensa peliverde le ofreció a las chicas unas cucharas que también traía consigo.

Cherise se puso en pie rápidamente, cogió el helado y una de las cucharas y empezó a comer.

—Está nerviosa —le dijo Trina a Skie, viendo como Cherise acaparaba todo el bote de helado para ella sola.

—¡No lo estoy! —gritó la aludida.

Después de que Cherise decidiera compartir el helado y entre las tres dejaran vació el bote, Trina y Skie terminaron de arreglar a Cherise. Tan solo maquillarla un poco y colocarle bien el tocado que llevaba en el cabello, el cual estaba recogido con el típico moño de la chica, que imitaba a una flor de cerezo.

Un rato después Cherise, Skie y Trina ya estaban listas para partir y poner rumbo a la iglesia.
Salieron del apartamento de la novia y fueron a la calle, donde las esperaba un hermoso coche negro, decorado con algunos adornos blancos.
Se montaron en el coche y las recibió el chico que conduciría para ellas.

—Buenos días, señoritas —saludó el chófer, un chico con rastas y parte del cabello teñido de azul—. ¿Estás nerviosa, Cherise?

—¡Calla y conduce, Frank! —gritó Cherise al borde de un ataque de nervios—. ¡Y ni se os ocurra volver a preguntarme si estoy nerviosa porque no lo estoy!

—¡Ah! Tranquilidad... —dijo Frank un poco asustado.
El chófer decidió arrancar antes de que Cherise volviera a tener un ataque de nervios-no-nervios.

Trina se hundió en su asiento, también asustada por la reacción de Cherise.
Las tres chicas se habían sentado en la parte trasera del coche y Frank iba solo delante.
Sin más dilación se pusieron en marcha.

La boda perfecta - Inazuma Eleven Go!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora