10. Un pinguino kawaii

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Kyungsoo estaba algo mucho ... peor. Si tan sólo Jongin supiera que él ocupaba mucho y no sólo un poquito de su corazón. Todo sería distinto.

Pero dados los hechos Kyungsoo no iba a arriesgarse, dejaría que todo pasase y dejaría a Jongin ser libre de estar con quién quisiera, aún sí para eso tenía que estar metido en una enorme cabeza de pingüino.

- Ve algo hyung? - preguntó Jongin desde afuera del disfraz.

- Absolutamente nada - respondió molesto aún dentro del oloroso traje. Tendría que rociarle un poco, no, bastante perfume y obligar al personal de la tienda a que lo lave.

- Genial.- escuchó que festejo- Nos llevamos este también, Tao.

- Ok, hasta ahora van seis - apuntó el chico rubio que habían encontrado trabajando ahí. Al parecer a Amber se le había ido la caridad y lo había echado de su casa. Kris aún vivía en casa de sus padres y al señor Wu no le agradaba mucho el chico rubio con ojeras. Tuvo que buscarse un departamento cerca a la universidad y un empleo para tener que comer.

- Son muchos Jongin, y ¿porque tengo que tener yo el de Pororo? - Kyungsoo exigía una explicación para tener que utilizar aquel vergonzoso traje que además de apestar a sudor y otras cosas más le quedaba extremadamente grande, parecía un pingüino cabezón.

- Porque eres MI PororoSoo - respondió Jongin sonriente.

- Esa no es una buena razón - refuto Kyungsoo aún dentro del traje - Voy a mandar a lavar esta cosa.

- No puede Kyungsoo hyung, se echara a perder y tendrán que pagar su precio original - advirtió Tao acercándose para empaquetar todo lo que Jongin había pedido.

- No pienso ponerme una cosa así de apestosa en la cabeza.

- Lo siento hyung, puede rociarle perfume, talvez sí necesita que desaparezca ese olor. Kai ven y firma esto.

- Ya. Me voy a quitar esto

Kyungsoo anunció y se dirigió a un lado de la tienda para deshacerse del apestoso traje. Dio una corta mirada hacia donde se encontraban los menores y se dirigió al área del personal por un baño.

Encontró un pequeño cuarto con un lavamanos y un espejo en el que se vio reflejado, él y toda su actuación se derrumbaron dejando al afligido y tierno Kyungsoo que todos veían, todos menos Jongin.

"Jongin, tonto Jongin. No, tonto Kyungsoo. Jongin solo sigue a su corazón, a su infantil corazón que le dice que haga todo esto por la persona que quiere. Tú deberías hacer lo mismo Do Kyungsoo. Seguir a tú corazón, ¿Qué te dice tú corazón ahora mismo?"

"¿Mi corazón? Me dice que vaya a casa a ver la maratón del «príncipe del tenis» mientras como los nachos antidepresivos que Baekhyun me trajo ayer. Sip eso me dice mi corazón."

La respuesta de su Kyungsoo interior se vio interrumpida por la chillona voz ya muy conocida para él.

- Kyungsoo-ah!!! ¿Sigues vivo o fuiste tragado por el retrete?

- Ya quisieras, Luhan. No, sigo vivo.

- te demoras mucho Kyungie. ¿Qué tanto haces? Jongin te está esperando. -Luhan se alejó de la puerta al escuchar que jalaban la cadena y el seguro abrirse.

- Es necesario que te lo cuente todo? - preguntó sacudiendose las manos en su cara.

- Ok, que asco, no quiero escuchar la historia de tus residuos...- el pelirosa se secó el rostro con la su brazo alejándose del menor con una mueca de asco.

*Confession song* [Kaisoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora