I
Una mirada nunca antes engendrada.
Un instante jamas redactado.
Dos corazones que laten al unísono y aun no lo saben.
El apetito de una caricia que no debe ser.
Un boleto de ida a plutón con la primera vez que mis ojos contemplaron tu encanto.(No sabes que existo, pero, pronto lo sabrás.)
II
Sé que me viste, la curiosidad te mataba.
Un simple roce de vistas, efímero, fugaz e inapreciable, banal para todos en este pedazo de mundo al que llamamos hogar, pero, era mí roce, mío, mío, mío y eternamente mío.
Nadie nunca podrá arrancarlo de mi alma.
Una puerta abierta al cosmos que ignoramos.(Sabes que existo, pero, aun deseo más.)
III
Ya es tarde, si lo es.
Ya mi ser notó tu presencia.
Ya la lanza atravesó mi pecho.
Ya el carcelero liberó las bestias.
Sé que es indebido, pero, la atracción se intensifica.
Te veo tan inalcanzable.(Por favor tocame, haz que tu piel conozca la mía.)
IV
Si me acerco arruino todo.
Debo ser cuidadoso.
Mi deseo debe ser clandestino.
Tu figura me lleva al borde de la locura, pero, debo calmar.
Maldita sociedad hipócrita, mil veces maldita seas por censurar mi deseo.(Recién anoche te soñé)