I
Ancio
Terrateniente que reclama mis tierras, que aun sin saberlo es dueña de todo lo que me complementa.Soy un gran hombre de temple rudo, corazón de gruesa y áspera coraza, pero, cuando te miro tambalean mis piernas.
Controlas mi tiempo como torre gregoriana mientras la dualidad de tu presencia es mi delirio, estas tan cerca y quiero tocar tu mano.
Te veo siendo mujer completa, mientras yo me siento los pedazos de quien era un día, nunca te perdonare por recordarme lo que es amar.
Pero, hoy me las juego, te acompaño a escondidas al parque y te diré hola. No lo sabes aun, pero, me cuesta.
Al fin lo hice!!!! Te dije hola!!! El tiempo se freno bruscamente y fue tanta mi epifanía que mi corazón se sintió volar sobre nubes de terciopelo.
Sentí lo divino...