Entré corriendo al aeropuerto y miré a Aaron con un poco de esperanza.
- Se fue -dijo Aaron con seriedad-. Se lo prometiste, ¿qué clase de persona hace eso?
-Yo. Es que no lo entiendes, a mi... Yo...
-No digas nada, acabas de meter la pata y cuando ella regrese, será difícil que te perdone, adiós -dijo dándome unas palmadas en la espalda dejándome solo.