May POV
No sé qué haré estos días, estoy de vacaciones pero aquí no conozco a muchas personas aunque bueno sólo llevo un año y medio y me he centrado mucho en los estudios, mi mejor amiga Alex está unas semanas en California con su famila ya que llevaba meses sin verlos y le han dado la sorpresa del viaje, podría quedar con Chris y James, unos amigos que conocí en la Universidad pero no tengo ganas, supongo que me quedaré en casa tumbada, leyendo y comiendo.
Tanto planificar mis vacaciones no me he dado cuenta de que estoy delante del banco. Diooooos cuanta cola!!!!!
Después de 10min por fin me toca... Pero de repente entran 5 tíos armados y nos obligan a darles todos los objetos de valor. Menos mal que hoy no tenía batería en el móvil y lo he dejado en casa.
Mientras los atracadores recogen todas las cosas de valor, entre ellos mi reloj y mi cartera, un hombre que está sentado en el suelo a 2 metros de mí se niega a darle su cartera, el atracador le dispara en la cabeza matándolo al instante.
No puede ser, no quiero morir aquí, apenas tengo 20 años necesito vivir un poco más, de repente noto una lágrima bajar por mi mejilla ¿en qué momento me he puesto a llorar? Me seco rápidamente las lágrimas esperando que nadie me haya visto, pero por desgracia encuentro a un chico rubio, de tez blanca y ojos azules mirándome y haciéndome señas para que me acerque a él, le miro con cara interrogante, no puedo moverme porque si no, me ven los ladrones, así que con la cabeza le señalo a los hombres, él parece entender mi mensaje así que se gira hacia los que parecen su grupo de amigos y yo me sumerjo en mi mundo, hasta que noto a alguien moverse junto a mí, en un primer momento me asusto pero de repente veo una melena rubia y me tranquilizo.
-¿Qué haces aquí tan sola?- me dice en un tono de voz bajo.
-No tenía planeado esto, si no habría traído conmigo a una amiga- le contesto con un tono sarcástico provocando que las comisuras de sus labios se eleven dejando ver una bonita sonrisa.
-Si llevas tan bien esto del atraco, puedo volver con mis amigos ¿no?- me dice acercándose a mi oído y sonriendo de lado.
-No, no te vayas- digo con la cabeza gacha.
Entonces agrandó su sonrisa y se acercó hasta un punto en el que pensé que me iba a besar, pero desvió la cara hacia mi oído y me susurró:
-Sé que no quieres que me vaya, y no lo haré.
Lo siguiente que ocurrió fue tan rápido que a penas me di cuenta, unas cuantas personas corrieron hacia los ladrones intentando desarmarlos y uno de ellos empezó a disparar para que el rehén soltara el arma y de repente noté una fuerte punzada de dolor en mi pierna, me habían disparado.
Me giro hacia mi nuevo "amigo" y le miro con una mueca de dolor.
-¿No tendrás un cinturón o algo parecido no?
-¿Para qué?
Dirijo mi mirada hacia mi pierna herida, le miro y veo como el miedo le invade el rostro.
-¡Dios mío estás sangrando!- me dice susurrando pero con un tono alto.
-¿En serio? No me había dado cuenta, ¿tienes un cinturón?
-Sí- se levantó un poco la camiseta que llevaba y me dejó su cinturón- No vas a morirte ¿verdad?- me pregunta con un rastro de miedo en su voz.
-Esto va a parar un poco la hemorragia- dije haciéndome un torniquete -pero no duraré eternamente sólo con esto, necesito ir a un hospital.
-¿Cuánto tiempo tienes más o menos?
-No lo sé, puede que una hora o un poco más pero no estoy segura-
Estuvimos 45min esperando a que la policía entrara y el oji-azul sólo sacaba temas para distraerme y la verdad es que se lo agradecía porque sí que me olvidava un poco de que estábamos siendo rehenes de un atraco y me habían disparado en la pierna, cuando por fin la policía atrapó a los ladrones preguntaron por si algún rehén estaba herido, y de repente mi compañero saltó y dijo:
-¡Aquí! ¡Ella está herida!- dijo en un tono alto ya que casi todos los presentes se giraron a mirarnos.
Los enfermeros vinieron con una camilla y me metieron en la ambulancia, junto al que parecía ser mi nuevo "amigo".
La verdad es que su cara me sonaba pero ahora mismo no sabía de qué, supongo que como es de aquí lo habré visto en algún sitio.
Tras notar como la ambulancia se ponía en marcha notaba como me pesaban los párpados así que eché un último vistazo a mi acompañante, que me miraba con un gesto de preocupación en su rostro, y cerré los ojos por completo.
ESTÁS LEYENDO
UNEXPECTED
Teen FictionMay es una chica de lo más normal, que ha ganado una beca en una de las universidades más importantes de Houston, Texas. Ella es de España, al igual que su familia a la que ha tenido que dejar para irse a vivir con su mejor amiga Alex. Les ocurrirán...