Prólogo

15 2 0
                                    

                 

Y no iba a mentir. Aquella chica se sentía completamente sola. Sin ganas de vivir. Sentía que todo a su alrededor era una estúpida y cruel mentira. Un invento para hacerla sentir bien y cuando todo el mundo la veía feliz apuñalarla por la espalda como un caballero traicionando a su pueblo. ¿Pero que podía esperar? No podía confiar en nadie. Ya tanta gente le había fallado que ya no sabía quién le decía la verdad y quién no.

Por el día dibujaba una sonrisa para evitar las típicas preguntas que se hacen por educación, mas no le interesaba la respuesta a nadie. Por la noche un mar de lágrimas recorría su rostro odiándose a sí misma por todos los errores que cometió. Por todas las oportunidades que dio porque de verdad creía en la palabra de aquella persona en la que pensaba tontamente que se podía confiar, pero no, todo era una estúpida y cruel mentira.

Sus ojos rojos e hinchados estaban presentes cada noche mientras que ella miraba aquella afilada cuchilla pensando en que era lo que estaba bien y lo que no.

"¿El dolor físico calmará el emocional?" Pensaba ella mirándose las muñecas y posando delicadamente la cuchilla en ellas. "¿Será verdad que todo es mejor cuando una persona se corta?" Seguía pensando "¿Volveré a ser feliz haciéndolo y dejando de pensar en mis problemas?" Tal vez eso era lo que tenía que hacer: dejar de pensar en los demás y preocuparse solo por ella.  Tal vez desaparecer por un tiempo la ayudaría a averiguar a quien realmente le importaba.

Solo pensaba en él. Aquella hermosa sonrisa que el tenia... aquella sonrisa que le volvía loca a ella. Aquellos ojos penetrantes de color café que tanto le gustaba observar a la luz de la luna. Aquellos labios que le hacían tocar las estrellas solo con rozarlos en un tierno beso. Sus caricias, sus abrazos, sus bonitas palabras susurradas al oído...

Tal vez solo se equivoco al enamorarse de él. Tal vez eligió mal al volverle a elegir a él después del daño que le causo en vez de elegir al chico que la trataba como una princesita... su princesita... a pesar de que ninguno de los dos quisiera una relación. Pero se tenían el uno al otro. A ella le atraía él, su risa, sus ojos color verde, la manera en la que la trataba, todo le recordaba tanto a él, al que la hizo llorar por primera vez por un chico. Le recordaba tanto a como se sentía con el que le entro miedo... miedo a enamorarse de él y volver a sufrir...

Y por culpa de ese estúpido miedo todo acabo entre ellos dos. Y ella se volvió a fijar en aquel chico que la hizo sufrir. Volvió a querer arriesgarse con él otra vez sin importar el resultado, pero por mala suerte el resultado comenzaba a ser el mismo. Cambiaron cosas: cenas en restaurantes caros, ir a casa y que me preparara la cena, escuchar lo mucho que le gustaba... Pero al igual que ella tuvo sus dudas al principio, él las comenzaba a tener ahora.

¿Y si se enamoraba de otra? El no quería hacerle daño a ella, pero no se daba cuenta que con ese extraño comportamiento de dudas era con lo que más la hacía sufrir. ¿Y que importaba si en un futuro no estaban juntos? Lo importante era vivir el presente, y si los dos tenían que seguir por caminos separados pues sería porque el destino lo quería así. ¿Para qué pensar en el futuro? Si es algo que no se sabe que pasará.

Ella sufriendo por celos que en su vida había sentido, él sin entender el porqué, pero lo que él no sabía es que ella estaba comenzando a sentir lo que sintió en un principio, no estaba enamorada, pero sentía que podía funcionar con ayuda de los dos y con comprensión. "¿Él habrá sentido celos en alguna ocasión?" Se preguntaba ella "¿Sabrá lo que es tener celos cuando de verdad te importa alguien a quien no quieres perder?" Porque eso era lo que ella sentía, sentía celos a que en cualquier momento ella se pudiese enamorar de él y él se enamorase de alguien más y acabase sufriendo, y que todas aquellas palabras se desvanecieran como al pasar por la niebla no notas su presencia. Como si a él no le hubiese importado nunca los sentimientos de ella.

Ella comenzaba a dudar de lo que estaba bien y lo que estaba mal.  Comenzaba a dudar que era lo que sentía por aquel chico que cada día le demostraba más que había cambiado. Aquel chico al que ya no reconocía. Comenzaba a dudar si tenía que dejarle y volver a lo que era antes, una chica que no confiaba en los tíos y solo se divertía con ellos, estar con él, haciendo que cada día se enamorase mas de ella intentando no cagarla en su meta, o seguir siendo la chica que volvía a ser gracias a él, pero con otra persona.

Su cabeza no pensaba con claridad, sabía que necesitaba desaparecer para aclararse todas las ideas que se le pasaban por la mente, pero también sabia con seguridad que haciendo eso solo conseguiría fastidiar todo mucho mas. Quería saber a quien de verdad le importaba...

Y todo eso paso por su mente en tan solo una noche de insomnio...

[Sin Título]Where stories live. Discover now