«•I really care•» Eren×lectora

»Introducción«

~Eren~ susurre.
~Eren~ volví a hacerlo

-Déjame un rato más- murmuro.
No se lo permitiría, por su culpa estaba en esta situación y no lo dejaría ir tan fácil.

~Tenemos que irnos~ le susurré de nuevo acercándome a su oreja.

-Mmnnh.... Bien bien estoy despierto- se levantó lentamente mientras bostezaba.

~Idiota~ susurre para mí misma.

-Escuche eso- me dijo desinteresado mientras se rascaba el cuello algo adormilado acción que ya reconocía ya que había estado más de 5 horas con el, era un tipo de rasgo que lo caracterizaba a él y a su incompetencia.

"Vuelo número 45 favor de abordar en la puerta 4-A"

Mire mi reloj como por décima vez y me levante de un salto.

-Vámonos- le dije demandante.

- ¿Ahora? Hay que descansar un rato, dormir encima de maletas no es muy cómodo- se quejó al ver mi rápido actuar.

-Ese es tu problema, yo tengo que llegar a Alemania hoy-resalte la palabra para que entendiera que hablaba enserio.

-Pfff Bien..-se levanto sin más quejas y recogió sus maletas.
Lo jale del brazo para apresurar nuestro paso y llegar antes pero él se quejaba y lloriqueaba haciéndome imposible concentrarme en el camino que debía seguir para encontrar la salida a la que tenía que llegar, en ese momento el aeropuerto me pareció un laberinto gigante del que tenía que salir lo antes posible.

-¿A dónde  vamos?- preguntó Eren atrás  de mi, seguro con la intención de desesperarme, o eso pensaba yo.

-Mientras tú dormías yo busque una forma de sacarnos de este lío, tomaremos 3 vuelos a Alemania para poder llegar a tiempo, entregar el paquete, llevar los regalos y dejarte en tu casa.- dije con los nervios a todo y la vista alterada al estar viendo los letreros que podrían darme una pista de a dónde ir.

-¡Genial!, ¿Lo planeaste todo tú sola?- me preguntó sorprendido y aliviado, pues ya no tenía que pensar un estupido plan que seguro nos dejaría peor de lo que estábamos.

- Si si , ahora calla un minuto- enfoque mi mirada a un gran cartel que contenía toda la información que necesitaba y corrí hacia dónde señalaba.

-¡Oye esp-espera!- Eren trataba de seguirme el paso pero solo seguía dando pasos torpes mientras chocaba sin parar con la gente que se cruzaba en el camino.

-No hay tiempo, si no llegamos perderemos todo- y no mentía solo este vuelo nos salvaría de esta situación, todos los errores de Eren, todos los retrasos y esa cantidad innumerable de problemas que había tenido desde que me desperté se resolverían si tomábamos este vuelo así que no tenía tiempo que perder pues yo solo quería llegar a Alemania.

Al llegar divisé a la señorita que se encargaba de revisar los boletos de entrada y dirigir a los pasajeros, rápidamente me abalancé a su lado recargándome en su escritorio.

-Disculpe- solté si más.
-Por favor necesitamos subir a ese avión- le pedí sin dejar el contacto visual.

-Señorita, ¿Tiene un boleto para este avión?-

-Ehh?.. A ¡Claro!- torpemente busque en mi pequeña mochila en el bolsillo del frente.

-Aquí tiene- se los mostré dándoselos en la cara.

-Gracias.. - me miró nerviosa y los reviso para verificar nuestros asientos.

-Bien sus asientos están en la parte de atrás así que por favor aborden- nos dio la bienvenida amablemente mientras que yo solo pensaba en llegar a mi destino.

Con una sonrisa de satisfacción en el rostro y aún sin soltar la mano de mí ahora confundido acompañante empecé a abordar el bendito avión,

-¿De dónde has sacado los boletos?- me preguntó al entrar al avión.

-¡De donde sea! ¿Eso qué importa? ¡¡Nos vamos a casa!!- le dije lo más feliz a que había estado en todo el día nada podía arruinar el momento lo que me parecía imposible ahora era una realidad para mí ¡¡lo había logrado!! Llegaría a mi destino sin importar los obstáculos.

-Oye tienes que tranquilizarte apenas estamos a la mitad del camino, es el primer avión recuerdas?-como si hubiera leído mi mente arruino el preciado momento que había estado esperando.

-Tienes razón ¡Esto apenas inicia!-le mire a los ojos, el sintiéndose intimidado por mi mirada llena de seguridad me sostuvo la mirada sorprendido.
-Ahora... Déjame llevarte a tu asiento-le sonreí descaradamente.

-¿¡¿QUÉ?!? ¿No estamos juntos?-me miró como si estuviera mal de la cabeza por habernos separado.

-No fue mi culpa, era lo que había- lo empuje hacia su asiento.

-Ahora no causes problemas y se un buen niño- le advertí, le di una palmada en las espalda y le di un beso en la frente para retirarme a mi asiento.

-Eres una mujer cruel [T/N]- gritó desde su lugar.
Puse mis cosas en el compartimento de arriba del asiento me preparé me senté y di un largo suspiro seguido de una sonrisa que daba a entender mi enorme tranquilidad y esperanza ya que en algunas horas estaría donde debía de estar.,, aunque deba llevar conmigo una carga como Eren.