NO

Podré romper tu corazón, eso es seguro.

Pero nadie romperá tu corazón como yo lo habré hecho.

Muy posiblemente brota desinterés por los poros de mi cuerpo, porque pierdo el manejo de la realidad muy seguido, queriendo hacer parte de una diferente.

Pero, ¿Te has detenido para notar que por tí dejo la irreverencia a un lado, y mi característica manera grosera de responder se debilita al escuchar la gracia de tu voz? ¿Que tu voz, junto con otros pocos elementos, son lo único que encuentro real en esta cruda ridiculez de universo en que habitamos?

La mentira hace parte de mi vida. Es simplemente algo que hago, mentir.

Te mentiré sobre mi tristeza, y sólo a tí daré respuestas verídicas sobre mi alegría.

Lo más seguro es que no tenga la claridad de por qué ahora, cuando el cielo e inevitablemente las almas se oscurecen, pienso en tí al escribir esto. Tal vez estoy haciendo algo indebido al dejar a los sentimientos gobernar la razón.

Y muy probablemente por este motivo, de mí se dice que he perdido la cabeza. Este estamento no se aleja de la verdad porque ciertamente no sé la razón de todas estas palabras, de todos estos hechos escondidos en el blanco de una hoja de escritura.

Y es que al fin y al cabo a todos nos hará falta la cordura pero ten la certeza, de que nadie nunca enloqueció ni enloquecerá de la manera en que yo lo he hecho por tí.

Desengáñate, ya es muy tarde para que la corriente que tiene tu nombre deje de arrastrarme a su voluntad; y abre los ojos, que yo me quiero dejar llevar.