F*cking Teather.[NaeKuro]

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Unos fuertes pasos de escuchaban llegar.

-¡CHICOOOOOS!-Exclamó Asahina entusiasmada mostrandoles a todos un papel, tan móvido por la misma que era ilegible.-¡Ya está aquí, ha llegado!

Todos observaron confusos a la nadadora.

-Ya está aquí...¿el qué, señorita Asahina?-Se atrevió a preguntar Fujisaki.

-¡El festival de verano!¡Ese dónde todos los cursos realizan x actividad para mostrarselo al público!-Respondió entusiasmada.

-¿En la academia Pico de Esperanza hay de eso?-Questionó Celestia.

-¡Nope!Pero he ido a convencer al padre de Kiyoko y ha accecido.♪

La nombrada suspiro, llevándose una mano a su frente y golpeando ligeramente esta con resignación.

-A mí me parece divertido.-Dijo Naegi.

-¡Opino lo mismo que Naegi!-Acompañó Maizono.

-¡Estoy de acuerdo, si está en el reglamento!-Soltó Ishimaru.

-¿Te apuntas, Mukuro?-Preguntó Naegi a la morena, que se hayaba cruzada de brazos.

-¿Mhm?Sí, por qué no.-Respondió seria, aunque Makoto seguía sonriéndole.

-¿Qué nos toca a nosotros, Asahina?-Interrogó el delegado.

-Hmmm, a nosotros nos toca...¡La obra de teadro;Blancanieves!

A todos les pareció una buena idea, así que comenzaron con la distribución de personajes y secundarios.

-Yo propongo que el gordo sea uno de los enanos.-Soltó Oowada.

-¡S-santas chicas en 2D, no!-Se quejó este.

-Yo creo que haría mejor el papel de cerdo...-Pronunció Celes.

-Dejad al pobre Yamada y concentraos en esto.-Ordenó Oogami.

-Mhm...Yo creo que Maizono haría bien de Blancanieves...-Murmuró Fujisaki, avergonzada.

-¿Yo, Blancanieves?-Dudó la peliazul.

-Entonces, Togami sería tu principe.-Confirmó Celes con sus dedos entrelazados bajo su mentón.

-M-Maizono...y amo Byakuya...¡M-ME NIEGO!¡Q-Que lo haga Naegi!¡Es mi príncipe azul!-Gritó la escritora, mientras el rubio ignoraba la situación.

-¿Y-yo?

-¡Sí, Nae lo bordará, tíos!-Dijo de la nada Hagakure.

El castaño suspiró, pero acabó aceptando su papel.

Acabaron los personajes así.

Maizono//Mukuro-Blancanieves.
Naegi//Togami-Príncipe.
Fukawa//Oogami-Madrastra.
Ishimaru//Fujisaki-Cadazor.
Restantes-Enanitos y decorado.

-¡Parece que serás mi principe, Naegi!-Canturreó Maizono.

-Eso parece...-El castaño se hayaba cabizbajo, sonrojado por la picardía ajena.

Pasarón los días, el grupo de alumnos seguía ensayando aquella obra, hasta que la desgracia ocurrió.

-¡S-Sayaka ha enfermado!-Anunció la nadadora, notablemente preocupada.

-¿N-Nos hemos quedado sin princesa...?-Tartamudeó Chihiro.

-Eso parece...-Suspiró.-Tendrás que hacerlo tú, Mukuro.

-...¿Yo?

-¡Sí, tú eres su suplente, debes seguir el reglamento y actuar por ella!-Aclaró Ishimaru.

-Supongo que está bien...-Suspiró la morena.

-¿Serás mi princesa, Mukuro?-Questionó Naegi.

La morena sintió un calor sorprendete sobre sus mejillas, coloreadas de carmín al ver aquella sonrisa.-Su-supongo.

Llegó el día de la obra, todos estaban emocionados. Tanto los actores, como el público.

Se apagó la luz.

-¡Por favor, sigan el reglamento y apaguen sus teléfonos!-Se escuchó reproducido por los altavoces del teatro.

[No hace falta que me ponga a narrar Blancanieves verda.]

En la última escena de lo que había sido una genial obra de teatro, la joven Mukuro se hayaba rodeada de sus amigos vestidos de enanitos, al igual que ella de Blancanieves, fingiendo su muerte.

Entonces se oyeron unos pasos llegar. Makoto, vestido como un auténtico príncipe, se acercaba a Mukuro.

-Oh mi joven y bella Blancanieves, ojalá mi amor por ti consiga despertarte de tu letargo...-Fue lo único que logró escuchar Mukuro antes de que sintiera una suave presión sobre sus labios. Naegi la estaba besando.

Debía ser fuerte, debía serlo...

Pero su fuerza se iba con cada pequeño movimiento de labios realizado por el castaño.

Mukuro no aguanto más y levantó sus manos hasta las mejillas ajenas a ella, profundizando más y más aquel beso que estaba supuesto a ser un pico.

Las claras mejillas de Makoto se teñían de rojo, rogando por aire tras un largo minuto de beso.

Y tras eso, una bonita escena de los 7 enanitos y la pareja feliz cerró el telón, siendo llena de aplausos.

Todos se fueron al vestuario a ponerse el uniforme escolar, debían llevarlo para el resto del "festival". Pero en el pasillo de los vestuarios.

-¿M-mukuro?-Era Naegi, sonaba tímido.

La nombrada se giró, pero permaneció sin contacto visual con el contrario.

-¿Sí?-Respondió seca.

-H-has actuado m-muy bien.-Pronunció pasando de largo.

-Makoto.

-¿Mukuro?-Frenó.

Tragó saliva.-E-el beso.

Makoto enrrojeció.

-Ah, e-eso. B-besas bien...-Murmuró.

-¿L-lo crees?

-¡Sí! Para ser la guerrera definitiva, también eres muy buena actriz.-Sonrió para continuar andando.

. . . . Espera.

Ese beso que llevaba todos sus sentimientos. . .

¿Se lo tomó como actuación?

¡P*TO TEATRO!